bilbao. Iago Herrerín estaba ayer instalándose en Madrid. Con los bártulos a cuestas, en una nueva casa, en otra ciudad; Madrid, devoradora en la bienvenida: "He llegado esta mañana y aquí ando liado". El ex guardameta del Bilbao Athletic ha fichado por el filial del Atlético de Madrid, que milita en el grupo I de Segunda División B, para las próximas dos temporadas. Su carrera en Lezama se acabó. Así lo entiende. "Es algo que se veía venir", señala.
La historia de Iago Herrerín (Bilbao, 25-1-1988) empieza a escribirse con números. El portero ha sido titular en el filial rojiblanco las últimas dos temporadas, en las que ha jugado 32 y 36 partidos. Además, llegó a participar en varios entrenamientos de la primera plantilla. Llevaba desde la campaña 2005-06 en Lezama, cuando llegó en edad juvenil procedente del Danok Bat, con una cesión al Barakaldo en el curso 2006-07. Con esos registros a sus espaldas, Iago confiaba en dar el salto al primer equipo este verano. No obstante, Joaquín Caparrós no se ha decantado por él. Raúl Fernández, que el pasado curso estuvo cedido en el Granada y el anterior en el Conquense, ha sido el designado para ocupar la plaza de segundo portero en la primera plantilla rojiblanca. "Yo contaba con poder ser el suplente de Iraizoz, pero el entrenador no contaba conmigo, pese a que lo he jugado todo con el Bilbao Athletic no había confianza", resume el bilbaino. "Es lo que diga el míster y si no le gustas, no hay nada que hacer", insiste.
El contrato de Iago con el Athletic finalizaba el pasado 30 de junio y el club rojiblanco podía prorrogar un año más esa relación de forma unilateral en el caso de que fuera para jugar en el primer equipo. Pero la entidad de Ibaigane desechó esa posibilidad y optó por ofrecerle un año más de vinculación con el conjunto filial para ser cedido a un club de Segunda. "No quería seguir. No me convenció la proposición que me hacían de renovación y con esto y con todo lo que pasó lo mejor era que me marchara", explica Iago. Y es que en la historia de Iago con el Bilbao Athletic hay un episodio decisivo. El meta rojiblanco fue expedientado por el club en 2008 por disputar un torneo de fútbol sala. Como ocurre en todos los equipos, los jugadores tienen prohibido practicar otros deportes por el riesgo que corren a sufrir lesiones. Al parecer, Iago participó en un campeonato de fútbol sala en la localidad de Castro en el que además, curiosamente, actuó de delantero, en vez de en su posición natural de portero. El Athletic le sancionó y además, desde entonces, el cancerbero bilbaino no volvió a ejercitarse con la primera plantilla a las órdenes de Caparrós. Ahora empieza una nueva etapa en la carrera de Iago ante la que se muestra "muy contento".
con el primer equipo Además, este verano realizará la pretemporada con el primer equipo del Atlético de Madrid. "Yo he firmado con el filial y quedarme va a ser muy complicado, pero yo voy a darlo todo, el luchar que no quede", concluye ilusionado.