- El histórico acuerdo europeo para la recuperación por el que España recibirá 140.000 millones de euros para afrontar la crisis derivada de la pandemia pone a prueba la fortaleza de los pactos de investidura, debido a que estos fondos incluyen condiciones que podrían marcar la agenda política nacional.

De hecho, pocas horas después de que los 27 culminaran con éxito la trascendental cumbre de Bruselas, desde Unidas Podemos, socio del PSOE en el Gobierno de Pedro Sánchez, se hacía notar que no esperaban cambios estratégicos sustanciales en la salida social a la crisis, con mención expresa a la derogación de la reforma laboral.

Y si tras el Consejo de Ministros la portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, consideraba el acuerdo “un auténtico paso de gigante para la reactivación económica y social de Europa”, el líder del PP, Pablo Casado, puntualizaba que, si bien ha sido “un buen acuerdo”, también supone “una enmienda” a la política de pactos del Gobierno con Podemos, EH Bildu y las fuerzas nacionalistas.

Entre tanto, las comunidades autónomas se apresuraron a solicitar una conferencia de presidentes para abordar el reparto de los fondos, peticiones cursadas por el cántabro Miguel Ángel Revilla, el valenciano Ximo Puig y el andaluz Juanma Moreno y atendidas inmediatamente por la Moncloa.

Además, Sánchez pidió su comparecencia en un pleno extraordinario del Congreso para informar de lo acordado en Bruselas, de modo que la gestión de los recursos aportados por la UE acaparará la agenda parlamentaria de aquí a final de mes.

En esa comparecencia y también en la conferencia de presidentes el jefe del Ejecutivo se va encontrar con un panorama de exigencias que ya se están perfilando, tanto desde las filas de los partidos que apoyaron su investidura como por parte de la oposición.

No habló del acuerdo el vicepresidente segundo y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, pero en las redes sociales valoró el “alcance histórico y sin precedentes” de un acuerdo que, a su entender, permitirá afrontar la crisis “sin recortes” y avanzando en el programa del Gobierno de coalición.

Un programa que incluye la derogación de la reforma laboral, que para el diputado de Unidas Podemos Gerardo Pisarello está “más vigente que nunca” y que no puede estar sujeta a lo pactado en Bruselas.

Íñigo Errejón (Más Madrid) y Joan Baldoví (Compromís) alertaron de que Sánchez no tiene ahora “excusas” para no cumplir sus acuerdos de investidura y no derogar la reforma laboral.

Y por parte de ERC su portavoz en el Congreso, Gabriel Rufián, puso el acento en el cambio en el panorama político que puede suponer el fondo de recuperación europeo.

Dijo que no resultará gratis y que “sospecha” que comportará recortes en los presupuestos, que a su juicio serán más fáciles con Ciudadanos que con los republicanos catalanes.

Precisamente, el portavoz parlamentario del partido naranja, Edmundo Bal, afirmó que, si Europa “ha estado a la altura”, ahora le toca estarlo al Gobierno con reformas estructurales que podrían salir adelante con el PP y con Ciudadanos, porque no se pueden dejar en manos de “populistas y nacionalistas”. Sobre la supresión de la reforma laboral, fue muy claro al tachar este propósito de “irrealizable, una utopía”.

Pablo Casado se refirió a esos compromisos al incidir en que el consenso europeo es “una enmienda a la política del Gobierno de España” en lo que toca a sus pactos de investidura con Podemos y sus vínculos con EH Bildu y nacionalistas.

Y celebró que la negociación comporte responsabilidad en el uso de los fondos y reformas estructurales como la vigente reforma laboral.

750.000 millones en Europa. La UE ha acordado destinar a sus socios 360.000 millones en préstamos y 390.000 millones en ayudas.

140.000 millones en España. Será la cantidad de euros que reciba el Estado español. 72.700 millones serán transferencias y 67.300 préstamos.

Plan Marshall. El dinero del proyecto para la reconstrucción de Europa tras la Segunda Guerra Mundial, impulsado por EE.UU. en busca de aliados en el Viejo Continente, era una quinta parte del pactado por la Unión Europea para paliar las consecuencias económicas de la crisis del coronavirus.

Fondos de Cohesión. Según recalcó el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, las ayudas a fondo perdido que se destinarán al Estado son diez veces mayores que las que recibió entre 2014 y 2020.

11%

Los 140.000 millones de euros que va a recibir el Estado español suponen un 11% del PIB, aunque se debe tener en cuenta que este posiblemente se vea reducido como consecuencia de la pandemia.

64%

El próximo marco financiero plurianual, con 1.074 billones de euros, recorta su presupuesto un 2%, pero si se tienen en cuenta las partidas para la reconstrucción, el dinero aumenta un 64%.

30

Años son los que tienen los 27 países miembros para devolver la deuda conjunta, la primera en la historia que asume la Unión.

62%

Es la parte del presupuesto del marco financiero plurianual que se destinará al sector primario y la cohesión entre regiones.

“Es un gran acuerdo para Europa y para España y es uno de los momentos más brillantes de la UE”

Presidente del Gobierno