La defensa de Carmen M.G, la mujer que supuestamente asesinó en 2019 a su pareja, un extrabajador de banca vasco que vivía con ella en Castro Urdiales, y cuya cabeza apareció en la casa de una amiga de la acusada ha impugnado el informe policial por contener “valoraciones” de las pruebas que, a su juicio, pueden inducir la decisión del jurado, lo que han rechazado tanto la Fiscalía como la acusación particular. A esta impugnación, el fiscal ha alegado, en una vista previa, que ese informe, elaborado por los agentes que encabezaron la investigación iniciada en septiembre de 2019 después de que una amiga de la acusada descubriera el cráneo del hombre asesinado dentro de una caja que le había entregado Carmen, “facilita la interpretación” en una causa tan compleja como esta, con más de 4.000 folios.