BILBAO - Los tres jóvenes, con edades comprendidas entre los 18 y los 21 años, acusados de la agresión sexual a una menor el pasado sábado en la zona de Iturribide-Fika fueron detenidos a primera hora de ayer y, tras declarar ante la autoridad judicial, ingresaron en la prisión de Basauri. El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, lamentó lo sucedido y aseguró que "personas con un historial delictivo no pueden campar a sus anchas por nuestras calles".

Los hechos se produjeron, según la investigación, el pasado sábado cuando la víctima, una niña de 13 años de edad, salió con sus amigos a celebrar el Carnaval. La niña se quedó sola, por causas que se desconocen, momento que aprovecharon los tres jóvenes para agredirla cerca de Solokoetxe. Fue una mujer la que, a las 6.00 de la mañana, encontró a la menor aturdida, por lo que llamó a Emergencias para solicitar ayuda.

Tras recibir la denuncia de la víctima, los agentes encargados de la investigación lograron identificar a las personas implicadas en los hechos y durante la jornada de ayer procedieron a su detención. Los tres sospechosos cuentan con numerosos antecedentes policiales, principalmente por delitos contra el patrimonio, según trascendió de la investigación.

El alcalde de Bilbao trasladó ayer "a esta niña de 13 años y a su familia nuestra solidaridad", antes de señalar la necesidad de "investigar para que los presuntos culpables pasen a disposición judicial como se ha hecho". El alcalde alabó la coordinación policial y pidió que "todo el peso de las leyes caigan sobre estos presuntos delincuentes". Aburto calificó de "personas deleznables a, los que cometen hechos de esta naturaleza".

Respecto a los antecedentes de los agresores, el alcalde no quiso desvelar detalles de la investigación, aunque reconoció que "una reflexión que hay que volver a hacer es que personas con un historial delictivo no pueden estar campando a sus anchas por nuestras calles".

Sobre la necesidad de revisar los puntos negros de Bilbao, entre los que se encuentra Solokoetxe, explicó que "los puntos negros en las ciudades tienen que ver con los recovecos, el urbanismo y con la iluminación. Estamos trabajando con diferentes áreas para acabar con estos puntos; el de Solokoetxe y otros que se encuentran en el mapa de puntos peligrosos".

Por su parte, la concejala de Igualdad, Nekane Alonso, reconoció que "el hecho de que se trata de una menor impacta mucho más. Nos dice que debemos seguir trabajando en prevención y en valores". Alonso añadió que "desde el Área de Igualdad, en la parte de violencia de género, vamos a ponernos en contacto con la familia y les vamos a ofrecer toda la ayuda que esté en nuestras manos". La concejala dejaba así entrever que, al tratarse de una menor, la ayuda será también psicológica "y toda la que necesiten" los familiares.

La concejala de Igualdad lamentó lo ocurrido en unos momentos en los que existe una gran concienciación por parte de la sociedad. Según los datos que trascendieron de la investigación no hay indicios de penetración ni violación, "pero sigue siendo una agresión en toda regla", dijo rotunda Alonso, que insistió en "la necesidad de seguir trabajando en educación y en valores y dejando claro a los chicos que hay que respetar a las mujeres y a las niñas. Y que tengan siempre claro que un no es un no y un sí es un sí".

A este respecto, todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de Bilbao firmaron ayer una declaración de condena frente a esta agresión y mostraron el compromiso por seguir trabajando por una sociedad más justa e igualitaria.

" El Ayuntamiento de Bilbao en su compromiso por conseguir una sociedad bilbaina justa e igualitaria, insta a toda la ciudadanía a no ser cómplice de ningún tipo de agresión sexista y, por tanto, a mantener una actitud de tolerancia e impunidad cero. Todos debemos posicionarnos activamente ante cualquier expresión de violencia contra las mujeres, denunciándola, no consintiéndola", afirma la declaración.