El Departamento de Salud del Gobierno vasco ha pedido a la población que extreme la precaución ante la alerta naranja por temperaturas extremas que habrá durante buena parte de la jornada de este martes en todo Euskadi.

Salud ha recordado que la acumulación de calor desde hace días y el previsto al menos hasta finales de esta misma semana exige un mayor cuidado en las medidas a implementar y en los consejos a seguir, especialmente por parte de la población de riesgo: menores de cuatro años, personas mayores, embarazadas, enfermos crónicos y personas que realizan actividad física en exteriores.

En la jornada de este lunes, los servicios de emergencias de Osakidetza atendieron a quince personas como consecuencia de las altas temperaturas.

Entre otras recomendaciones, Salud ha citado la conveniencia de contactar con frecuencia con las personas mayores que vivan solas y no dejar a nadie dentro de un vehículo estacionado y cerrado, especialmente en las horas centrales del día.

Recomendaciones

Los consejos difundidos desde el Departamento de Salud incluyen la sugerencia de evitar la exposición solar en las horas centrales del día; no exponer nunca directamente al sol a bebés de menos de 6 meses; protegerse del sol mediante sombrero, gafas de sol y protector solar; usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar; y evitar realizar actividad física intensa en episodios de altas temperaturas, y sobre todo durante las horas de más calor.

En caso de realizar travesías o senderismo, se aconseja consultar la predicción meteorológica y asegurar la provisión suficiente de agua. También es recomendable consultar con el personal sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y estén relacionados con las altas temperaturas (debilidad, fatiga, mareos, náuseas, visión borrosa, desmayo).

En casa e interiores es conveniente mantener ventanas y persianas cerradas cuando las temperaturas son altas, así como aprovechar el aire de la noche para ventilar y refrescar las estancias. También se ha de evitar, en las horas más calurosas del día, el uso de electrodomésticos y aparatos que produzcan calor.

Salud ha explicado que el uso de ventiladores eléctricos puede brindar alivio, pero que cuando la temperatura supera los 35C, no son útiles para prevenir las enfermedades relacionadas con el calor, puesto que no reducen la temperatura corporal.

Si se nota mucho calor, es aconsejable tomar duchas o baños de agua fría. Otra alternativa es refrescarse el cuerpo, sobre todo cara y manos, con agua fresca y paños o esponjas mojadas. Si no es posible refrescar la casa, se aconseja pasar de dos a tres horas del día en un lugar fresco (como un edificio público con aire acondicionado).

Por otra parte, se debe beber agua y líquidos de manera frecuente, sin esperar a tener sed. También se ha de evitar consumir bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, puesto que no calman la sed y favorecen la deshidratación. Es recomendable aumentar el consumo de ensaladas, verduras y frutas para reponer las sales minerales que se pierden por el sudor. A su vez, se debe tratar de evitar las comidas grasas y demasiado abundantes, puesto que dificultan la adaptación al calor.