El primer sacerdote expulsado de la Iglesia en el Estado español por agresiones sexuales a menores, el expárroco Pere Barceló, ha sido condenado este miércoles a dos años y un día de cárcel por abusar sexualmente de una niña de 13 años, la segunda sentencia por este tipo de delito para el exsacerdote.

Barceló se convirtió en 2013 en el primer religioso condena a la "pena máxima de expulsión del estado clerical" en la Iglesia española por un caso de pederastia, por el que también fue condenado en 2016 a seis años de cárcel.

Abuso de menores

Fue denunciado ante la Iglesia por una joven que aseguró que a finales de los 90, cuando tenía 10 años, la había sometido a abusos sexuales continuados, unos hechos que el propio Barceló reconoció. El hasta entonces sacerdote ejercía como párroco de Can Picafort, una localidad de la isla Mallorca, en el archipiélago español de las Baleares (Mediterráneo).

Ahora, el exsacerdote ha sido condenado nuevamente a dos años de prisión y a indemnizar a la víctima con 15.000 euros y le imponen la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de 500 metros de ella durante cinco años y medio.

Aunque la Fiscalía pedía una condena de diez años, el Tribunal Superior de Justicia de Baleares aplicó en su sentencia la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, ya que los hechos se produjeron en 2007 y 2008.

El tribunal condena también a la Diócesis de Mallorca como responsable civil subsidiaria en caso de que Barceló no pueda hacer frente a la sanción económica por insolvencia.

Según la sentencia, el exsacerdote, en clases de catequesis, tocó los genitales de la niña, aprovechando las condiciones y el mobiliario de la sala en que se celebraban las sesiones de formación religiosa para cometer los abusos.

El informe encargado por la propia Iglesia en 2022 al despacho de abogados Cremades&Calvo-Sotelo sobre abusos en su seno recogía 1.382 denuncias y un mínimo de 2.056 víctimas en España, aunque el Defensor del Pueblo presentó en octubre de 2023 su propio informe, en el que constataba un total de 674 víctimas de abusos.