Ya ha comenzado el despliegue progresivo y la utilización de Maletik en la atención primaria que presta Osakidetza, un maletín sanitario digital que permite mejorar el servicio que se ofrece en los domicilios particulares de la ciudadanía vasca. Se trata de una tecnología pionera en el Estado, de la que están siendo dotados los equipos de atención domiciliaria, compuestos por personal médico y de enfermería, con el fin de facilitar su trabajo y garantizar una asistencia de mayor calidad. Osakidetza ha adquirido un total de 170 unidades de esta herramienta que desde el pasado mes de febrero ya está en funcionamiento, como experiencia piloto, en las OSIs de Barrualde-Galdakao que dispone de 17 maletines y en la de Uribe. La Consejera de Salud del Gobierno Vasco, Gotzone Sagardui, declaró ayer miércoles sobre esta novedosa iniciativa que “para Osakidetza, el uso de esta herramienta, que ha contado con una acogida muy positiva tanto en profesionales como en pacientes, es una apuesta más por una Atención Primaria fuerte, de calidad, cercana e innovadora”. También avanzó que está previsto que el despliegue en toda la red de Osakidetza se realice a lo largo de este mes.

Pruebas y registro digital

Maletik está dotado de una serie de herramientas digitales que permiten la captación de registros de constantes, imágenes e incluso audios de una auscultación y volcarlos en la historia del paciente. En concreto, este maletín médico para consultas domiciliarias dispone de electrocardiograma, espirómetro, dermatoscopio, otoscopio, tensiómetro, pulsioxímetro, fonendo, termómetro, tablet y una batería externa. Estas herramientas posibilitan mejorar el manejo y la capacidad resolutiva de la atención sanitaria en casa ya que se digitalizan todas las pruebas habituales que se llevan a cabo en ellas, como puede ser la realización de un electrocardiograma, tomar la tensión, o una auscultación a través del fonendo. Y los datos obtenidos en ese control médico domiciliario queda registrado directamente en la historia clínica del paciente sin tener que introducir después los resultados en ningún otro equipo. otras de las ventajas son que el médico de atención primaria podría realizar en tiempo real una consulta con profesionales de los centros de salud, o en caso necesario, realizar una derivación a especialista. Además, el proceso gana en seguridad al evitar la transcripción de constantes y el error en las mismas.

Ya implantado en Zeberio

Otro de los puntos fuertes de la herramienta es la posibilidad de poder acceder a los domicilios ubicados en las zonas de más difícil acceso como son las zonas rurales. Es el caso de la localidad de Zeberio, de poco más de un millar de habitantes distribuidos en setenta pequeños barrios en sus 47 kilómetros cuadrados de superficie. En torno al 27% de sus habitantes tiene más de 65 años y, de este colectivo, algo más de medio centenar supera los 85 años, una población de avanzada edad que requiere de mayores controles médicos y, muchos de ellos, son domiciliarios.

Y ayer miércoles, una de sus vecinas más longevas recibió la visita de su médico de atención primaria, Mikel Baza, con su maletín digital. Fue pasadas las 11.00 horas en el caserío Goikoa del barrio Barbatxano donde Juana Salcedo, de 96 años, reside al cuidado de familiares. “En general, está bien. No toma pastillas, ni siquiera para la tensión, pero tiene algunos problemas respiratorios que hay que controlar para que no haya sustos”, explicó su hija. Juana se prestó con tranquilidad, y una amplia sonrisa, a las diferentes pruebas rutinarias a las que fue sometida como la toma de la temperatura corporal o de la tensión arterial, el control de la saturación de oxígeno o, incluso, una dermatoscopia. Tras la exploración por parte de Mikel Baza, Juana aseguró sentirse “encantada” con las visitas médicas en su propio domicilio. “Para mi es muy cómodo que vengan hasta mi casa. Me da tranquilidad y más confianza. Prefiero que el médico venga aquí a tener que ir yo a la consulta o al hospital”, declaró.