El departamento de Educación del Gobierno vasco ha presentado este viernes el Plan de Orientación del Sistema Educativo Vasco, el primero de sus características en el Estado. Se aplicará en el marco de la Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato y Formación Profesional con el objetivo de contribuir a que el alumnado adquiera las competencias claves necesarias para dirigir su propio proyecto personal, académico y profesional.

El plan pretende reforzar el trabajo que desarrolla el profesorado orientador en los centros escolares públicos y concertados, aumentar su impacto y asegurar el máximo desarrollo de todo el alumnado. Para esa labor se considerarán las necesidades del alumnado, sus características y su contexto personal. Alineado con la Ley de Educación y la Ley de Formación Profesional, el plan también busca garantizar que el sistema educativo sea motor de cambio para la elección de itinerarios académicos y profesionales en condiciones de igualdad. La viceconsejera de Educación, Begoña Pedrosa, ha subrayado la importancia de que el sistema educativo cuente con herramientas suficientes para ayudar al alumnado en su desarrollo social, académico y personal. Por su parte, el viceconsejero de Formación Profesional Jorge Arévalo ha admitido que si bien el alumnado de FP ya se encuentra encauzado a un ámbito más concreto, “la orientación servirá para la continuación de los estudios o para clarificar una salida laboral”.

Alta participación en su elaboración

El Plan de Orientación del Sistema Educativo Vasco es fruto de un amplio proceso de participación. Arranca con un diagnóstico en el que participaron 6.730 personas entre alumnado, personal orientador y directivo de 150 centros diferentes. El diagnóstico obtenido se ha completado con el contraste de personas referentes en este ámbito. Posteriormente se han establecido el enfoque y los criterios a través de mesas de trabajo que han concluido en acciones y recomendaciones concretas.

En el caso del desarrollo del ámbito de la Formación Profesional, se ha colaborado con los sindicatos, la patronal y los Centros Integrados de Formación Profesional. Además, ha sido tratado en la Mesa de diálogo Social. Finalmente se ha diseñado un sistema de seguimiento y evaluación del plan que facilitará la elaboración de nuevos planes.

Desarrollar al máximo las potencialidades del alumnado

El I Plan de Orientación Educativa de Euskadi para la etapa de educación secundaria (2023-2026), se basa en los principios como son la protección de los derechos de la infancia, la universalidad, la prevención integral o la búsqueda del máximo desarrollo de las potencialidades de todas las alumnas y todos los alumnos.

Se centra en tres pilares fundamentales: la orientación académico y profesional, el desarrollo de la convivencia positiva y la respuesta a la diversidad e inclusión educativa y plantea cuatro  objetivos estratégicos: Fortalecer, alinear y dotar de coherencia el trabajo que desarrolla el profesorado orientador en los centros escolares públicos y privados-concertados de la CAE; aumentar el impacto de la intervención orientadora situando en el centro al alumnado en colaboración con las y los profesionales educativos; asegurar el máximo desarrollo de todo el alumnado considerando sus características y contexto personal.

Orientación libre de sesgos de género

Garantizar el sistema educativo como motor de cambio para la elección de itinerarios académicos y profesionales libres de sesgos de género y de discriminación motivada por cualquier índole o condición.

Asimismo, el desarrollo de las acciones incorporará la perspectiva de género en todas las dimensiones de la orientación educativa buscando fomentar la igualdad efectiva de mujeres y hombres, el enfoque de diversidad, la inclusión, la ética y la atención personalizada.

Empoderar al orientador

Una de las líneas de trabajo más destacables que propone el plan para la consecución de los objetivos es el empoderamiento de las profesoras y profesores orientadores. Para ello se propone establecer una formación continua especializada y el intercambio de conocimiento entre profesorado y personas orientadoras y poner a su disposición herramientas actualizadas y estructuras de apoyo.

Trabajar en equipo con las familias

No solo eso, sino que el tejer alianzas con las familias; la corresponsabilidad de madres, padres y personas al cargo de alumnas y alumnos es otro de los pilares que sustenta el buen desarrollo del plan y es a su vez, un elemento primordial para poner al alumnado en el centro de la acción orientadora. El desarrollo de este plan podrá sentar las bases e inspirar otros planes posteriores en los que puedan desplegarse orientaciones y directrices específicas en otras etapas educativas y asegurar una continuidad en la orientación educativa del alumnado a lo largo de la vida.

Plan de Orientación de la FP en Euskadi

FP-Euskadi incluye todas las actividades de formación y de aprendizaje dirigidas a la preparación para el ejercicio de una profesión y acceso al empleo. Por lo tanto, el modelo de FP integra, junto a las ofertas de formación profesional, la innovación, el emprendimiento y la internacionalización, la propia orientación profesional.

La orientación en la Formación Profesional, se recoge en tres ámbitos: la orientación psicopedagógica, que busca garantizar el bienestar emocional del alumnado, la orientación de FP para ofrecer continuidad en los estudios y salidas de empleo y la mediación a través de mediadores de aprendizaje para reforzar el aprendizaje a lo largo de toda la vida. Por lo tanto, la orientación profesional es un proceso de información y acompañamiento en la planificación personal del itinerario formativo y profesional en el marco del Sistema de Formación Profesional, que incluye posibilidades de formación profesional, elección de una profesión, perfeccionamiento, cambio de profesión, evolución del mercado laboral y oportunidades de emprendimiento, y desarrollo de habilidades para la gestión de la carrera profesional.

El proceso de orientación profesional se complementa con acciones como intervenciones en el alumnado con problemas de aprendizaje (inmadurez vocacional y actitudes negativas hacia su desarrollo), detección y análisis de dificultades específicas de aprendizaje, coordinación con agentes y apoyos socioeducativos y comunitarios externos al centro de aprendizaje, atención individual, personalizada, libre de condicionamientos de género, flexible y comprometida con las necesidades e intereses de las personas…

De manera más transversal, pero también con incidencia directa en el objetivo de promover la orientación profesional, destaca el modelo de aprendizaje colaborativo basado en retos de la FP Euskadi (ETHAZI), el cual tiene un contrastado impacto en el desarrollo de las competencias relacionadas con la habilidad de informarse y orientarse en los aprendizajes y en la vida laboral.