A falta de que los últimos datos de agosto corroboren que este verano sigue la estela del anterior, los agroturismos de Euskadi pueden decir que esta temporada está siendo tan buena como la de 2022. Ese año fue excepcional para los alojamientos rurales vascos después de que la pandemia favoreciera la inclinación de los visitantes por entornos naturales y sin aglomeraciones. Así, Idoia Ezkurdia, gerente de la Asociación de Alojamientos Rurales de Euskadi, expone que julio se ha cerrado con un 68% de ocupación, el mismo porcentaje que el año pasado. Sin embargo, entre las novedades, destaca que los clientes extranjeros ya suponen un 29% de las reservas, sumando un 5% más que en 2022.

“Estamos satisfechos en cuanto a que hemos llegado a unos datos muy parecidos al año pasado. Y nos satisface especialmente el hecho de superar los datos de 2019; en el caso de julio con un incremento de un 7%. Eso marca una dinámica de crecimiento”, revela Ezkurdia, quien menciona ciertas diferencias por territorios. “En Gipuzkoa hemos tenido un 75% de ocupación, igual que el año pasado; en Bizkaia un 60%, un 2% más; y en el caso de Araba, un 48%, un 8% menos que el año pasado, cuando hubo datos históricos en ese territorio”, concreta la responsable de Nekatur.

Esa tendencia continuista con respecto al año pasado parece que descenderá ligeramente cuando Eustat publique los datos definitivos de agosto. Ezkurdia adelanta que el año pasado la ocupación de este mes estival fue del 82% y este año todo apunta a que no sobrepasará el 80%. “A pesar de ello, la valoración sigue siendo positiva”, puntualiza. En ese sentido, en cuanto a territorios, afirma que Araba y Bizkaia suman el mismo porcentaje que en 2022, con un 68% y un 79% de ocupación respectivamente. Mientras tanto, Gipuzkoa se queda en un 85%, reduciendo en un 3% el porcentaje alcanzado el año pasado.

En lo que respecta a las pernoctaciones, Ezkurdia aclara que en junio y en julio parecía que la media de los clientes procedentes de otros territorios estatales se iba a reducir. Sin embargo, la media de julio y agosto ha conseguido afianzar esta cifra que ronda las dos noches por estancia.

Mercados emisores

En cuanto a la procedencia de los turistas que se alojan en los agroturismos, Idoia Ezkurdia asevera que principalmente siguen siendo estatales. Destacan, como cada año, los madrileños y catalanes. No obstante, este año menciona un aumento de visitantes procedentes de Andalucía y de la Comunidad Valenciana, así como otras comunidades de donde no era tan frecuente recibir turistas, como Murcia o Aragón. “Relacionamos ese aumento con las olas de calor que ha habido en el sur. Eran clientes que buscaban temperaturas más frescas”, afirma.

“En cuanto al cliente internacional, nos ha sorprendido”, reconoce Ezkurdia, quien desvela que el principal mercado emisor es el francés. Tanto es así, además, que ya suponen el tercer mercado, después de los madrileños y catalanes. Además, destacan los turistas procedentes de Alemania, Reino Unido o Francia. “Julio, según Eustat, se ha cerrado con un 29% de clientes extranjeros. Eso supone una subida, en comparación al año pasado, de un 5%”, evidencia.

Idoia Ezkurdia admite que su mayor ambición es llegar a las cifras del año anterior. “Había una predisposición por parte de los clientes, incluso algunos que eran nuevos, de buscar alojamientos en espacios naturales y sin aglomeraciones por lo que optaron alojamientos rurales. El año pasado tuvimos ese boom”, reconoce la responsable de Nekatur, atenta a las dinámicas que puedan darse durante los próximos meses.