El 25% de los niños ha sufrido bullying alguna de sus formas, según señala un estudio del Instituto de Innovación Educativa y Desarrollo Directivo de 2006. Sin embargo, la falta de datos actualizados dificulta saber cuál es el alcance real y actual del acoso escolar. Para este 3 de octubre, hemos hablado con Javier Coromina, miembro del Patronato de la Fundación ColaCao, entidad sin ánimo de lucro que lleva desde 2021 luchando contra el bullying y que se ha convertido en un gran altavoz de reivindicación y concienciación social que busca romper el silencio y conseguir que los casos se denuncien a tiempo.

"Fundación ColaCao empodera a los niños y niñas para que obtengan lo mejor de ell@s mism@s, enseñándoles a amar aquello que les hace únicos"

Coromina narra cómo Fundación ColaCao empodera a los niños y niñas para que obtengan lo mejor de ell@s mism@s, enseñándoles a amar aquello que les hace únicos y luchando contra uno de los grandes enemigos de la diversidad infantil: el acoso escolar. “ColaCao siempre ha sido una marca que ha estado al lado de los niños, empujándoles a sacar lo mejor de ellos mismos y de sus familias. Por eso la creación de una Fundación centrada en luchar contra el acoso escolar fue una apuesta que se dio de manera muy natural”.

La comunidad educativa al completo juega un papel crucial en la prevención y detección del acoso escolar. Fundación ColaCao.

Un programa educativo para sensibilizar contra el acoso escolar desde la prevención

Desde la Fundación ColaCao se trabaja en tres ejes para los proyectos de acción social: divulgación, educación e investigación. Uno de sus programas educativos más importantes es Somos Unic@s, desarrollado en colaboración con la Asociación No al Acoso Escolar (NACE), que tiene como misión sensibilizar a alumnos de Educación Primaria contra el bullying desde la prevención y la educación emocional.

Somos Unic@s proporciona a los alumnos herramientas para saber cómo actuar ante un caso de acoso escolar y comprende tres módulos de actividades: el primero, “Soy Únic@”, busca el fortalecimiento de la autoestima del alumn@. El segundo, “Tod@s somos diferentes” trabaja la empatía y el respeto hacia los demás y el tercero, “Junt@s contra el acoso escolar”, invita a detectar los procesos de acoso escolar mediante la unión y fuerza del grupo.

El programa, totalmente gratuito, pone a disposición de los profesores materiales didácticos adaptados a cada ciclo y con pautas de desarrollo. Los soportes están ideados para trabajarlos durante todo el curso de forma curricular a través de metodologías innovadoras como la gamificación.

El programa Somos Unic@s pone a disposición de los profesores materiales didácticos adaptados a cada ciclo y con pautas de desarrollo.

Asimismo, todo el material de este programa puede encontrarse en las lenguas cooficiales del Estado, y su aplicación en el aula es flexible en el calendario, de modo que cada profesor puede ajustarlo a las necesidades y características de sus alumnos.

Más de 1000 centros educativos de todo el país ya se han inscrito en el programa y recibirán esta formación más de 80.000 niños y niñas. Esto confirma la gran acogida de Somos Unic@s, un programa al que es posible apuntarse gratuitamente a través de este sencillo formulario.

La Fundación también ha llevado a cabo otro proyectos centrados en la divulgación, como el documental sobre el acoso escolar y el papel del deporte como herramienta para combatirlo, y en la investigación, trabajando en estudios sociológicos que aporten datos de calidad y rigor sobre la prevalencia en España del acoso escolar.

El acoso escolar afecta a 1 de cada 4 niños en España

Para Javier Coromina “el acoso escolar es hoy una de las mayores preocupaciones de las familias: afecta a 1 de cada 4 niños en España. Es un tema que nos toca a todos y en el que todos podemos hacer algo”. Insiste en la necesidad de romper el silencio ante el bullying y actuar sin miedo y con determinación y recalca el rol crucial de la comunidad educativa al completo (alumnado, profesorado y familias) para prevenir y atender esta lacra social.

El acoso escolar es hoy una de las mayores preocupaciones de las familias. Pixabay

Una de las principales preocupaciones para los padres, es que sus hijos reciban o ejerzan el bullying. Por este motivo, su papel a la hora de identificar que su hijo está sufriendo acoso escolar (sabiendo decodificar las señales, aunque no sean verbalizadas) es importantísimo para buscar una solución.

Por otra parte, es importante no dejar atrás al agresor, que también es una víctima porque detrás de un comportamiento agresivo (físico o emocional), se esconde un menor que está sufriendo y que canaliza ese dolor a través de la violencia. Para los expertos de la Asociación NACE, es necesario mostrarle confianza para averiguar que hay detrás de su comportamiento, dejarle claro lo inaceptable de su conducta e inculcarle la empatía como base para la relación con sus compañeros.

La regla de las 3 C para detectar el bullying

La Asociación NACE propone “La regla de las 3 C” para detectar un caso de bullying. Es muy importante prestar atención y observar al menor, ya que su cuerpo y su comportamiento “pueden hablarnos” y darnos mucha información.

En primer lugar, los cambios psicológicos y emocionales debe hacer que salten las alarmas. Cosas que antes no le pasaban y ahora sí: bajada de notas, cambios en el ritmo del sueño, pérdida o deterioro frecuente de material escolar, desinterés por salir, cambio de amigos e incluso moratones o arañazos en el cuerpo.

La regla de las 3 C

-Cuerpo: el cuerpo del niño acosado es un cuerpo que habla, un cuerpo encogido, una mirada triste, la cabeza va hacia el suelo.

-Cambios: hay cambios en las notas, deja de comer, come compulsivamente...

-Hacer Campana: el niño no quiere ir al colegio.





Otra señal de alarma es el absentismo, popularmente conocido como hacer campana, no querer ir al colegio. El menor acosado también suele sufrir el síndrome del “domingo por la tarde”, que pone en evidencia la somatización de la angustia y el miedo. La magnitud de estos síntomas suele ser proporcional a la intensidad y a la duración del maltrato y es un claro indicador de la gravedad del acoso escolar al que está sometido.

Finalmente, el cuerpo es la última señal de ‘La regla de las tres C’. El cuerpo no miente y cualquier anomalía como querer pasar desapercibido y mirar al suelo o presentar autolesiones puede ser síntoma de que existe un problema de acoso.

Hablar del bullying abiertamente para poder erradicarlo

Gracias a iniciativas como las de la Fundación ColaCao, cada día somos más conscientes como sociedad del problema del bullying y de las consecuencias que este arrastra. Únicamente hablando sin tapujos de ello y colocando el acoso escolar en el centro de la agenda podremos erradicarlo y lograr, entre todos, que un día no sea necesario celebrar este día.

Porque tal como afirma Coromina, “todo empieza por la visibilización de la problemática y la generación de conversación social alrededor del acoso escolar. Debemos poder hablar de ello frontalmente y aunar fuerzas desde todos los sectores sociales (no solo los centros escolares y las administraciones) para avanzar hacia su desaparición”.