- El director de Migración y Asilo del Gobierno vasco, Xabier Legarreta, denunció ayer el “control selectivo y racista” que ejerce la policía francesa en la frontera de Irun y ha reclamado “rutas y corredores seguros” para los migrantes.

Legarreta hizo esta petición después de que a primera hora de ayer se descubriera el cuerpo sin vida de un nuevo migrante en el río Bidasoa, que supone el quinto ahogado en el plazo de poco más de un año.

Se trata de un joven de raza negra de entre 20-25 años cuyo cuerpo fue encontrado y sacado del agua por efectivos de la Guardia Civil, en una zona del río fronterizo situada entre el puente internacional de Behobia y la isla de los Faisanes.

La investigación trabaja en la identificación del joven muerto, que llevaba puestos un pantalón corto y una camiseta tipo polo y que por “el buen estado” del cuerpo parece indicar que ha muerto por “ahogamiento” y “muy reciente”, indicaron fuentes de la delegación del Gobierno en el País Vasco. La Guardia Civil recorrió el río aguas arriba con motos de agua y patrullas terrestres por sus orillas en busca de objetos personales e indicios que puedan aclarar las circunstancias de la muerte y ayudar en la identificación.

Un vez conocido el suceso, el director de Migración y Asilo del Gobierno vasco, Xabier Legarreta, quien acudió ayer al homenaje a los gudaris y milicianos celebrado en Bermeo, lamentó que el fenómeno migratorio en tránsito vuelva a mostrar “su cara más dura y dramática”.

A su juicio, el control “selectivo y racista” que ejerce la policía francesa en la frontera de Irun obliga a que estas personas “se vean obligadas a utilizar rutas menos seguras para conseguir su objetivo, provocando en algunos casos situaciones dramáticas como la vivida esta mañana”. “Desde el Gobierno vasco, una vez más, exigimos rutas y corredores seguros. Los corredores humanitarios son más necesarios que nunca”, añadió Legarreta.

Por su parte, el delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, lamentó, también este “nuevo drama humano” de una persona migrante que “busca un lugar donde desarrollar una vida y se topa con la muerte en una frontera en el seno de Europa”, según publico el responsable socialista en redes sociales.

Con el fallecido de ayer son cinco los migrantes en tránsito que han muerto en poco más de un año en el Bidasoa, en el térrmino municipal de Irun, cuando trataban de cruzar el río fronterizo y proseguir su viaje desde su país hacia Francia u otros países europeos.

El 22 de mayo de 2021 falleció ahogado Yaya Karamoko, de Costa de Marfil, de 28 años; Abdoulaye Coulibaly, de 18 años y natural de Guinea Conakry, perdió la vida el 8 de agosto; y el 20 de noviembre pasado fue hallado otro cadáver que no fue identificado de manera oficial.

El 30 de marzo de 2022 fue encontrado el cuerpo de un migrante subsahariano desaparecido 18 días antes, cuando tres se adentraron en aguas del río fronterizo y solo dos de ellos alcanzaron la orilla ya en Iparralde.

lll Implicación del Gobierno vasco. SOS Racismo Gipuzkoa denuncio ayer los controles fronterizos “que son responsables” de muertes en el río Bidasoa y demandó al Gobierno vasco que, “en el marco de la Eurorregión Nueva Aquitania-Euskadi- Navarra, se dirija al Ejecutivo francés que surja de las elecciones de este domingo” para exigir su cese. En un comunicado, la ONG lamentó que, en vísperas del día mundial de las personas refugiadas, “una nueva muerte golpea las conciencias” y aunque admite que “ha habido algunas declaraciones al respecto”, añadió que “nada ha cambiado”, por lo que reiteró su demanda a las instituciones vascas , apuntó en su texto.

“Los migrantes se ven obligados a utilizar rutas menos seguras para conseguir su objetivo”

Dtor. de Migración y Asilo del G. Vasco