Los vascos mejoraron en 2020 la puntuación que dan a su propia vida al alcanzar un 7,6 sobre 10, a pesar de que fue el año marcado por la pandemia, en el que solo uno de los indicadores bajó respecto a años anteriores, el del estado de ánimo. El Instituto Vasco de Estadística (Eustat) dio a conocer ayer miércoles el resultado de la Encuesta de Bienestar Personal correspondiente al año pasado, cuando la satisfacción con la vida en general de los vascos mayores de 16 años mejoró en relación a 2014 (obtuvo una nota de 7,1, y también respecto a 2019 (fue de 7,4). La mejor puntuación (7,9) se observa entre las personas que declaran tener unos ingresos mensuales netos en el hogar superiores a 2.500 euros, sin que se aprecien diferencias entre mujeres y hombres. Este indicador baja a medida que disminuyen los ingresos como el nivel de instrucción. En cuanto a la edad, los menores de 50 años son los más satisfechos con su vida (7,7).

El valor que cada uno da a su propia vida recibe la nota más alta: 7,7, seguido de la satisfacción con la vida en general y las relaciones personales (ambas con 7,6). Por detrás se sitúan la satisfacción con la vivienda y el entorno (7,3) y la satisfacción con la economía doméstica (7,0). En el caso de la vivienda y el entorno, el mejor resultado (7,5) se obtiene entre los nacidos en Araba, frente al 7,4 de los guipuzcoanos y el 7,3 de los vizcainos, aunque en todos los casos ha mejorado desde 2014.

Los hombres otorgan a este aspecto mejor nota (7,5) que las mujeres (7,2). El estado de ánimo es el único indicador que ha empeorado, tanto respecto a 2014 como a 2019, al obtener un 6,2 (3 décimas menos que en 2014), y obtiene el valor más alto entre los jóvenes. En este aspecto anímico la nota más baja se da entre quienes no tienen estudios y reciben menos ingresos y sube más entre hombres (6,4) que entre las mujeres (6,1). También se detecta que los solteros (6,3) están más animados que los viudos, separados o divorciados (5,9) y ligeramente más que los casados (6,2).

En cuanto al tiempo de ocio, la media de satisfacción es de 6,8 y asciende hasta un 7,8 entre los mayores de 65 años. La menor puntuación la dan los de entre 35 y 49 años (6,1) y los ocupados (6,2) frente a quienes están inactivos (7,5). En este aspecto están más satisfechas las personas residentes en Gipuzkoa (7,0), que las de Araba o Bizkaia (6,8 en ambos casos).

La vida propia

La valoración de la vida propia, es decir, la consideración de que la vida de cada cual merece la pena, se puntúa en promedio con un 7,7, dos décimas más que en 2014 y una menos que en 2019, siendo calificada de "alta" por el 57,5% de la población, frente al 1,2% que la considera "baja". También se observa la mejor puntuación (8,0) entre las personas que declaran tener unos ingresos mensuales netos en el hogar superiores a 2.500 euros y la más baja (6,9) entre las que no tienen estudios. Se obtiene una nota ligeramente mejor que la media entre las personas jóvenes de 16 a 24 años (7,9), mientras que a nivel de territorio de residencia o de género no se aprecian diferencias significativas.

Y en cuanto a la valoración de las relaciones personales, al igual que otros indicadores, alcanza su valor máximo (7,7) entre las personas con estudios superiores, mientras que el mínimo (7,1) se da en las que no tienen estudios. Y se observan mejores puntuaciones a medida que aumentan los ingresos en el hogar.

El indicador de Confianza en las personas, y sube al 6,8 entre los jóvenes de entre 16 y 24. De todos los aspectos consultados el que obtiene el peor resultado (4,5) es el de Confianza en los poderes públicos, que no llega al aprobado al obtener un 4,5, aunque es el indicador que más ha mejorado (1,1 puntos) respecto a 2014. Sólo un 4,3 % de la población confía "mucho" en los poderes públicos, frente al 46,6 % que confía "poco".

Edad, estado civil,...

50

En cuanto a la edad, las personas de menos de 50 años son las más satisfechas con su vida (7,7), frente a las de 50 y más (7,5). En cuanto al estado civil, las personas viudas, separadas o divorciadas son las más satisfechas con su tiempo de ocio (7,3), frente a las solteras (6,6) y casadas (6,9), tal y como revela el último informe del Eustat.