Las pernoctaciones registradas en julio en los establecimientos hoteleros de Euskadi se han desplomado y han decrecido un 50,8 % respecto al mismo mes del año anterior, mientras que las entradas de viajeros han bajado también considerablemente, un 45,2 % menos.

El Instituto Vasco de Estadística -Eustat- ha publicado este jueves la encuesta mensual de establecimientos turísticos correspondiente a julio, cuando se contabilizaron 179.843 entradas, frente a las 328.082 de julio de 2019, y 340.376 pernoctaciones, cuando en el mismo período del año anterior fueron 692.414. El descenso de pernoctaciones ha sido más acusado en Bizkaia, un 59,2 % menos, mientras que en Araba ha sido del 51,3 % y en Gipuzkoa del 42 %.

Las entradas de turistas han disminuido también en mayor medida en Bizkaia, un 58 % menos. En Araba esta bajada ha sido del 47,1 % y Gipuzkoa ha sido el territorio en el que menos impacto ha tenido este descenso, un 29,3 %.

Respecto a las tres capitales vascas, en San Sebastián las entradas han decrecido un 23,6 % y las pernoctaciones un 39,7 %; en Gasteiz las primeras han bajado un 49,4 % y las segundas un 54,8 % y en Bilbao la disminución ha sido del 60,6 % y del 62,9 %, respectivamente.

Estos datos, asegura el Eustat, ponen de manifiesto la prolongación del efecto de la crisis de la covid-19 sobre el sector hotelero vasco.

En julio se contabilizaron 510 establecimientos del sector abiertos, más que los 372 de junio pero por debajo de los 581 del mismo mes de 2019. Se triplicaron los centros hoteleros cerrados durante todo el mes, 109 frente a los 33 de julio del año pasado.

También se constata un importante descenso de turistas extranjeros. Así, del total de las pernoctaciones registradas, 236.404 fueron de viajeros estatales, un 31,8 % menos, y 103.972 de extranjeros, un 69,9 % inferior al número de visitantes de fuera de España que durmieron en estos establecimientos en julio de 2029. En cuanto a las entradas, 119.524 fueron de visitantes del Estado español, un 26,7 % menos, y 60.319 de otros países (-63,4 %).

ESTANCIA MEDIA

La duración de la estancia media fue de 1,89 días, por debajo de los 2,11 días del mismo mes de 2019 y el grado de ocupación por plazas descendió 29,1 puntos porcentuales al pasar del 71,1 % del año anterior al 42 % del pasado mes.

El grado de ocupación por plazas fue del 36,9 % en Araba ; del 36,1 % en Bizkaia y del 49,7 % en Gipuzkoa, lo que supone unos descensos interanuales de 24, 32,3 y 28,3 puntos porcentuales, respectivamente.

Según esta estadística, la tarifa media de los hoteles fue de 85,9 euros en julio, un 22,4 % menos que hace un año.

En Araba esta tarifa se situó en 68,1 euros (-14,1 %); en Bizkaia en 70,8 euros (-21,7 %) y en Gipuzkoa en 102,7 euros (-28 %).

El efecto de la crisis del coronavirus en los alojamientos rurales ha sido similar al observado en los hoteles. Abrieron sus instalaciones 351 frente a los 385 de julio de 2019 y cerraron 80, cuando hace un año lo hicieron 35.

La entradas de viajeros en estos alojamientos rurales fue de 14.054, un 34,5 % menos y las pernoctaciones sufrieron un retroceso del 31,7 % al registrarse 44.051.