- No se podrán juntar grupos de más de diez personas, incluso en la calle, y solo se podrá consumir en bares estando sentados. Son algunas de las restricciones que se impondrán en Euskadi para tratar de frenar la expansión del coronavirus, a las que se suman otras como la suspensión del transporte público por la noche, el cierre de pubs y discotecas o la prohibición de fumar si no se puede mantener una distancia de dos metros. Así lo anunció ayer el Gobierno vasco tras la primera reunión del comité asesor del Plan de Protección Civil de Euskadi, presidida por el lehendakari, Iñigo Urkullu. "Estamos preocupados por el impacto que tienen las agrupaciones de muchas personas en los distintos lugares, tanto a nivel de ocio infantil o juvenil, o de personas más mayores. Esos agrupamientos grandes de personas hacen que el virus se propague de una forma más rápida", advirtió la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, quien dio a conocer las nuevas medidas que se pondrán en marcha probablemente mañana, al término del encuentro.

A la reunión asistieron representantes de los diferentes niveles institucionales, desde el propio Gobierno vasco -Josu Erkoreka, Arantxa Tapia, Nekane Murga, Estefanía Beltrán de Heredia, Cristina Uriarte, Iñaki Berraondo y Juan José Aurrekoetxea- a los tres diputados generales, los alcaldes de las tres capitales de la CAV, el presidente de Eudel y el delegado del Gobierno español.

Todos los asistentes compartieron, según explicó Tapia, la "preocupación" por el rápido avance que está adquiriendo el virus en las últimas semanas, sobre todo debido a las concentraciones de personas, y analizaron cuál es la situación en distintos espacios públicos, como plazas, parques infantiles o playas. "Tenemos que trabajar de forma más intensa para evitar esos agrupamientos y mantener las distancias", alertó Tapia. Para ello se adoptarán dos tipos de medidas: unas más generales, para toda la CAV, de forma inmediata, y otras "quirúrgicas", en aquellas zonas donde se produzcan más contagios. "Los indicadores nos muestran una nueva realidad epidemiológica, ante la que es necesario adoptar medidas más estrictas que permitan la contención de la transmisión del virus", destacó la consejera de Salud, Nekane Murga, quien subrayó que, "más allá de las medidas que como Administración puedan implementarse, exige también un compromiso individual de cada uno de nosotros".

Las nuevas restricciones se centran principalmente en la hostelería y en reducir los grupos de contacto. De esta forma, en Euskadi se prohibirán las reuniones de más de diez personas, incluso en la vía pública, como ya sucedía con anterioridad en establecimientos hosteleros. Esta limitación se extiende también al deporte no federado que se realice al aire libre, las actividades de turismo activo y naturaleza, o las visitas a centros recreativos.

Respecto a la hostelería, solo se podrá consumir estando sentados, no de pie, tanto en el interior como en el exterior, en mesas o en la barra. También habrá novedades en cuanto a la separación de las mesas: si bien hasta ahora era suficiente con dejar 1,5 metros entre ellas, ahora se deberá garantizar esa distancia entre las personas de los diferentes grupos. Además del cierre de todos los pubs y discotecas, los locales hosteleros deberán bajar la persiana a la 1.00 de la madrugada, no pudiendo servir ni aceptar nuevos clientes desde la medianoche.

También se eliminará el transporte público nocturno —a excepción de los taxis-, no circulando ningún servicio a partir de la 1.30 horas. Asimismo, en estos estará prohibido ingerir alimentos cuando el trayecto sea inferior a dos horas, "de forma que podamos garantizar que la mascarilla se use el 100% del tiempo", dijo Tapia. En las piscinas tanto municipales como privadas el aforo quedará limitado al 60% y el tiempo máximo no podrá superar las tres horas. Las medidas también afectarán al sector cultural, ya que en todos los eventos culturales y deportivos que se celebren con público la autoridad sanitaria deberá realizar previamente una evaluación de riesgo.

"Nueva onda epidémica"

Por su parte, la consejera de Salud aseguró que los datos confirman que Euskadi continúa inmersa en una "fase ascendente de una nueva onda epidémica de covid-19", que evoluciona de forma diferente a cómo lo hizo en primavera. En la actualidad, "afortunadamente" el virus afecta a personas más jóvenes y, por lo tanto, con menor riesgo, y el aumento de nuevos casos es más lento. En parte, consideró Murga, debido a que las medidas de contención "han dado sus frutos", como la red de vigilancia que, reforzada hasta alcanzar los casi 300 profesionales, "permite detectar de forma temprana los casos y actuar inmediatamente, realizando un gran volumen de pruebas a contactos. De ahí que muchos de los casos se detecten en pacientes asintomáticos, cosa que en marzo no ocurría". Otras medidas como el uso obligatorio de la mascarilla y las restricciones en los municipios más afectados o en el ocio nocturno han sido "determinantes para contener hasta ahora la expansión del virus". Sin embargo, la consejera de Salud recordó que el covid-19 "sigue aquí y continuará ganando terreno si no cambiamos algunos de nuestros hábitos de interrelación".

Uno de los aspectos que más preocupa en la actualidad es el aumento de ingresos, tanto en planta como en UCI, que, "aunque asumible por el sistema sanitario, debemos evitar que siga incrementándose". También se está produciendo una escalada en la cifra de personas contagiadas de más de 60 años, "con mayor riesgo de tener alguna complicación relacionada con la infección covid" y se sigue asimismo con inquietud el hecho de que el coronavirus haya vuelto a afectar a las residencias de personas mayores.