Un total de 28 han fallecido en las últimas horas en Euskadi infectadas por el coronavirus, por lo que la cifra total de muertos en la comunidad autónoma desde que comenzó la crisis sanitaria es de 1.020.

La COVID-19 ha provocado además el contagio de 12.355 personas, después de que este viernes se infectaran otras 266, según ha dado a conocer la consejera de Salud del Gobierno Vasco, Nekane Murga.

El número de fallecidos diarios es el menor desde de los últimos cuatro días, y el de nuevos contagios es el más bajo de los últimos tres.

Ha descendido nuevamente el total de personas hospitalizadas por estar contagiadas por el coronavirus hasta 1.076, lo que supone 67 menos que el pasado viernes.

También han bajado los ingresos en ucis hospitalarias, 13 en concreto, lo que hace que en estos momentos Osakidetza cuente con 108 camas de cuidados intensivos disponibles: 22 en Álava, 63 en Bizkaia y 23 en Gipuzkoa, aunque Murga ha explicado que este contingente se podría incluso ampliar dada la "mejora" que ha experimentado el sistema en los últimos días por una menor presión de la pandemia.

Ha aumentado el número de pacientes que se han recuperado de la enfermedad o que han recibido el alta hospitalaria, hasta los 6.556, y el porcentaje de positivos en los test realizados el viernes, que han vuelto a incrementarse hasta los 2.999, es el más bajo hasta ahora: el 9%.

Por territorios, en Araba han fallecido 4 pacientes más, con lo que el número total de fallecimientos es de 308. Ha habido 38 nuevos positivos, hasta los 3.194, de los que 174 están hospitalizados.

Bizkaia ha registrado 15 nuevas muertes (515 en total) y 201 contagios, por lo que la cifra global de infectados es de 6.868, con 664 hospitalizados.

En Gipuzkoa han muerto por coronavirus 9 personas en las últimas 24 horas, haciendo un total de 197 decesos. Los infectados diagnosticados son 2.293, después de los 27 nuevos, y los ingresos hospitalarios 238.

La consejera de Salud ha confirmado que se van a hacer test rápidos a todos los profesionales de Osakidetza, una vez que ya se han realizado a la práctica totalidad del colectivo de trabajadores del ámbito sociosanitario.

Se comenzará con el personal de especial riesgo, como los profesionales adscritos a las ucis, a las urgencias hospitalarias, a los que han atendido a pacientes con el coronavirus, a los equipos quirúrgicos y al de las unidades que asiste a pacientes oncohematológicos.

Posteriormente se irá extendiendo la prueba diagnóstica al resto de las 35.000 personas que trabajan en el Servicio Vasco de Salud con el objetivo de identificar cuántos de ellos han generado anticuerpos y reforzar así su seguridad y la de los pacientes.

En relación con el personal, la consejera se ha referido a la polémica surgida tras la alerta sanitaria decretada por la identificación de un lote de mascarillas defectuosas, cuya capacidad de filtro no era la que se le suponía.

Murga ha dado a conocer que de las 124.000 mascarillas de la marca afectada recibidas del Ministerio, se habían llegado a distribuir 13.200, aunque no todas ellas presentaban ese defecto, que ya se han retirado. Ha informado de que se está trabajando en identificar en qué servicios se distribuyeron y qué profesionales las usaron para hacer un seguimiento y establecer las medidas necesarias para reducir riesgos.

Además, la consejera ha adelantado que, desde la máxima cautela y siempre a expensas de la evolución de la pandemia, Osakidetza va a ir recuperando de forma progresiva su actividad normal.

Inicialmente está prevista la programación de las consultas, pruebas y cirugías que tengan un carácter urgente y preferente según criterios clínicos, para posteriormente retomar las actividades programadas que fueron suspendidas o anuladas a causa de la pandemia.