Las denuncias por violencia de género han descendido a la mitad en Euskadi durante estos días de confinamiento. Lo que a priori pudiera parecer una buena noticia, el descenso de las agresiones, en realidad no lo es. Y es el descenso de las denuncias lo único que indica es que es más difícil conocer el número de casos ocultos. En palabras de la directora de Emakunde, Izaskun Landaida, "estamos ante una situación inédita que requiere estar muy atentas y haciendo seguimiento constante para adoptar medidas acordes a esta situación de excepcionalidad ".

El hecho de que haya pasado poco tiempo desde el inicio del aislamiento hace que sea difícil ver la evolución de los casos reales y ello dificulta hacer valoraciones contundentes. En la reunión de seguimiento que se celebró ayer entre las distintas instituciones implicadas en los servicios a mujeres víctimas, el departamento de Seguridad informó de que durante la última semana las denuncias interpuestas por violencia de género han descendido a la mitad en comparación con el mismo periodo de tiempo en los dos últimos años, una evolución parecida al resto de atestados por otras causas.

Según Emakunde, entre las posibles razones del descenso se estima que las dificultades y el miedo a denunciar mientras se está viviendo con el agresor puede ser una de las causas, aunque también se baraja la hipótesis de que el mayor control social y la mayor cercanía del vecindario en estos momentos en los que toda la ciudadanía, cada vez más concienciada con estos temas, y que se encuentra en la casa de al lado las 24 horas, podría estar convirtiéndose en un factor que disuade.

En este sentido Landaida dice que "es clave que se mantenga esa vigilancia activa de la sociedad ante la violencia hacia las mujeres, más si cabe en estos momentos. Necesitan sentir que no están solas y que estamos en disposición de ayudar ante la mínima señal". Por ello, insiste en la necesidad de colaboración por parte de la ciudadanía en caso de intuir que se pueda estar produciendo algún caso de violencia. Asimismo, hay que tener en cuenta que en muchos de los casos de violencia de género el agresor es una expareja que no convive con la víctima y que en estos momentos estaría confinado en otro domicilio, lo que podría también ser un factor que explique el descenso de denuncias.

Teléfono de atención 24 horas

Por otro lado, desde el Departamento de Políticas Sociales ha informado de que las llamadas al teléfono de atención 24 horas se han mantenido en número, si bien han ascendido las referidas a necesidades inmediatas frente a las meramente informativas, así como las consultas relativas a regímenes de visitas y custodias. En las próximas semanas se verá qué evolución experimenta.

Según la información compartida, los servicios y recursos que prestan la diputaciones se han adaptado a las exigencias de la alerta, pero de momento no han detectado situaciones extremas ni demandas extraordinarias. Desde Emakunde y los diferentes departamentos del Gobierno vasco se ha reforzado durante este periodo la difusión de información sobre el teléfono 24 horas 900840111 dirigido a mujeres victimas, familiares o profesionales y sobre el 112 para casos de emergencia que cuenta con una APP descargable adaptada a personas con dificultades auditivas y visuales y permite la geolocalización. En este sentido se ha hecho una difusión masiva y se pide a los comercios que están en activo colaboración para colocar estos carteles informativos en sus locales.