- La suspensión de los vuelos directos entre Italia y los aeropuertos españoles mantiene expectantes a los vascos que se encuentran de vacaciones en el país transalpino. El exgerente de la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo Jon Aldeiturriaga y su mujer, Arantza, tenían previsto regresar hoy, vía Barcelona, tras una semana en Roma. “No sabemos si podremos volver a casa. No nos pueden tener aquí. Lo lógico es que nos repatríen y que a la llegada a Bilbao nos hagan una prueba médica en el aeropuerto”, aseguró Aldeiturriaga. Ayer, al cierre de esta edición, su vuelo de la compañía Vueling no había sido cancelado. La medida entró en vigor la pasada medianoche y permaneceré en vigor hasta el próximo día 25. “Solo nos queda esperar. Mañana (por hoy) si vemos que no podemos salir de Roma, iremos al consulado”. La posibilidad de tomar otro vuelo, por ejemplo vía Lisboa les supone 500 euros por cabeza. “Para eso me quedo aquí, pero ¿quién nos lo paga?”, planteó el exgerente.

“Lo lógico es que nos repatríen y nos hagan las pruebas médicas a la llegada a Bilbao”

Exgerente de asociación Casco Viejo