Alumnos vascos participan en las segundas Olimpiadas de Filosofía

214 alumnos y alumnas de Tercero y Cuarto de la ESO y de Primero y Segundo de Bachillerato participaron en las cuatro modalidades: 61 en disertación, treinta en dilema moral, 54 en fotografía y 83 en vídeo. "Este año tenemos más gente en fotografía y vídeo, creo que es por el tema abordado, que da lugar más a expresiones plásticas, artísticas, al relacionarlo con la mitología, con la fantasía, lo onírico y con la ficción", explicó Irene Lafuente, profesora del Instituto Txorierri, de Derio, y una de las organizadoras de la olimpiada.

Una de sus alumnas, Elisa, de 15 años, estaba entre las participantes. Sonriente e ilusionada, reconoce que fue su profesora quien la animó a participar. En cambio, deja claro que le apasiona la filosofía. "La tengo de optativa. Es muy interesante", subraya esta alumna de Cuarto de la ESO. "Estamos muy contentos, el año pasado la acogida fue muy buena y este año no solo participan los mismos centros que el año pasado, sino que participan muchos más", apunta, por su parte, Lafuente. Fueron 17 los centros participantes, entre públicos y concertados.

"El hecho de que haya profesores que participaran el año pasado y hayan animado a sus alumnos y alumnas también este año, que los departamentos de Filosofía de los colegios y los institutos lo tomen como una actividad más inscrita en sus asignaturas es una buena noticia. Además, hay gente que me ha dicho: Plantee desde el principio en la programación la participación en las olimpiadas de filosofía", continúa la profesora del Instituto Txorierri. "Estamos muy satisfechas y con mucha ilusión de seguir con esto y que vaya creciendo y de ir ampliando el grupo de personas que estamos en la coordinación para llegar a las tres provincias de la CAV", señala. En la actualidad son cuatro profesoras "pero tenemos algunos aliados bastante implicados".

"Ilusionados" Itziar Goiria y Ricardo Lanz acompañaron ayer a diez de sus alumnos del instituto Fray Juan de Durango que participaban en la prueba. El año anterior, una de sus alumnas ganó la prueba de dilema moral y otra quedó segunda en disertación. "Los alumnos vienen muy ilusionados. Hay que tener en cuenta que vienen de forma voluntaria un viernes a la tarde. Para ellos, venir a la universidad, participar en una actividad de este estilo es muy positivo, se lo pasan muy bien. El objetivo, al fin y al cabo, es disfrutar", explica Lanz.

"De cara al trabajo en las aulas del profesor, este tipo de actividades son muy útiles para motivar al alumnado y, además, es una manera de dinamizar la filosofía en Euskadi", subraya Lafuente. En los últimos años, el profesorado de Filosofía ha estado muy activo con la organización del Pentsatu! Jaialdia en Donostia, la celebración de cafés filosóficos en Bilbao y Tolosa, con la creación de Jakinmin, asociación de prácticas filosóficas...

Y es que, ante el paso atrás experimentado por la filosofía en el currículum escolar, después de que fuera eliminada como asignatura obligatoria en Segundo de Bachillerato, los profesores y profesoras decidieron sacar la filosofía a la calle. "Había un ambiente y un clima que ha acogido esto bien, es dar un espacio más a la filosofía y en este caso dirigido a los adolescentes", explica, satisfecha, Lafuente. "Filosofía es una asignatura muy bonita, requiere de mucho contacto con los alumnos, te dicen lo que piensan, razonan y eso hace que se establezca una relación muy bonita", defiende Goiria.

El nuevo Gobierno tiene previsto aprobar esta legislatura una reforma educativa que contempla la inclusión, de nuevo, de la asignatura de Filosofía como obligatoria en Segundo de Bachillerato.