Málaga - La Guardia Civil y la Policía Nacional localizaron en Málaga un importante arsenal de armas de guerra perteneciente al grupo criminal más peligroso de Holanda, desarticulado en octubre y que también contaba en Málaga con el mayor almacén de Europa de sustancias para elaborar drogas sintéticas.

Se trata de la segunda fase de la operación Star/Bananero, en la que se aprehendieron más de seis toneladas de cocaína el pasado octubre en un polígono industrial de Málaga y que conllevó la total desarticulación de la más peligrosa organización criminal holandesa asentada en la zona.

El arsenal fue localizado en un garaje alquilado por uno de los investigados y, entre otras armas, los agentes hallaron un fusil AK-47, cinco subfusiles de asalto Skorpion, dos pistolas semiautomáticas, un revólver, cuatro granadas de mano, tres silenciadores y abundante munición, todas ellas escondidas en un coche, municionadas y listas para su uso.

Los agentes también intervinieron 35 vehículos, la mayoría de ellos de alta gama, en los que encontraron numerosos huecos y dobles fondos practicados con sofisticados sistemas hidráulicos que los hacían totalmente inapreciables.

Hallaron asimismo otras sustancias estupefacientes que los narcotraficantes no pudieron comercializar debido a su detención: cuatro kilogramos de MDMA, 1,2 kilogramos de cocaína, un kilo de hachís y 20.000 pastillas de éxtasis.

Almacén de sustancias También fue localizado en Málaga el pasado abril el mayor almacén de Europa de sustancias precursoras para la elaboración de drogas sintéticas, con miles de kilogramos de productos químicos con los que se hubiesen podido producir más de ochenta toneladas de MDMA, 45 de anfetamina y 25 millones de pastillas de éxtasis.

En la nave también había 19.000 litros de ácido fórmico, 33.000 de formamida, más de 22 toneladas de sosa cáustica y, por otro lado, una tonelada de APAA y casi seis toneladas de PMK, compuesto este básico para la elaboración de MDMA, “que solo con esta aprehensión ha duplicado cifras de anteriores a nivel europeo”, según fuentes policiales.

La organización desarticulada contaba presuntamente con fuertes vínculos internacionales y está considerada la más activa y peligrosa de los Países Bajos, donde también fueron desmantelados tres grandes laboratorios de fabricación de drogas sintéticas.

Este grupo se encargaba tanto de distribuir e introducir en España grandes cantidades de clorhidrato de cocaína como de facilitar a otros grupos la logística necesaria para introducir en puertos holandeses, portugueses y españoles contenedores cargados con gran cantidad de droga, que posteriormente era distribuida por toda la península y resto de Europa.

En la operación fueron detenidas veinte personas, 16 en una primera fase en España y, durante los meses siguientes, otras dos personas en Holanda, una en Costa Rica y otra en Austria debido a una Orden Europea de Detención y Entrega. - Efe