Bilbao --Representantes de la plataforma A-8 Peajerik Ez, que apoyaron la pasada madruga en Briviesca (Burgos) los actos de liberación de la autopista AP-1, aseguraron ayer que la eliminación del peaje en esta autopista burgalesa demuestra que “ha caído un mito” y la vasca puede ser también gratuita.
Juan Carlos Poderoso, portavoz de la plataforma vasca que lucha por eliminar el peaje en la A-8, explicó que miembros de este grupo han ido a aplaudir en Briviesca los primeros coches que circularon de forma gratuita por la AP-1, en su tramo Burgos-Armiñón, ahora liberado, tras un periodo de ’44 años de pago.
Junto a integrantes de la plataforma estatal UPLA, que agrupa a miembros de otras agrupaciones españolas que luchan por la liberación de autopistas, participaron también en un homenaje a las 243 personas fallecidas en el tramo de la AP-1 en Burgos, alternativo al que ahora ya se ha liberado.
Juan Carlos Poderoso aseguró, además, que la eliminación del peaje en esta autopista rompe “un mito”, porque, en su opinión, demuestra que “las autopistas se pueden liberar”. De igual forma, recordó que la concesión de la autopista A-8 en Euskadi finalizó en 2003 y explicó que, después de esta fecha, son las diputaciones de los territorios de Bizkaia y Gipuzkoa las que “vieron el negocio” y cobran ahora el peaje.
Discriminatario Poderoso reiteró que el cobro en la A8 es “totalmente discriminatorio”, porque solo afecta al tramo entre Irún y Usansolo, mientras que el de Usansolo y La Coruña es gratuito. También apuntó que la alternativa al tramo de pago de la A-8 es “tercermundista y peligrosa”, porque cada día circulan por la misma 23.000 vehículos (de los que más de 7.000 son pesados), pese a que dispone de un carril en cada sentido. Por el tramo de pago de la A-8, sin embargo, afirmó que transitan a diario 31.000 vehículos por los tres carriles de los que dispone en cada sentido.
Desde la plataforma A-8 Peajerik Ez llevan años reclamando la gratuidad de la autopista por considerar que es totalmente abusiva para quienes la utilizan. De hecho, el año pasado denunciaron que las nuevas tarifas -aprobadas en 2017- eran una “burla y un engaño más” para quienes conducen por esta “amortizada autopista”. “No son capaces de entender -aseguró- que empeñarse en continuar con este discriminatorio peaje está provocando un importante flujo de dinero hacia Cantabria, una pérdida infinitamente mayor” que suprimir las tarifas actuales. - Efe