Cangas de Onís - Un atracador se suicidió ayer tras protagonizar un robo con rehenes en una sucursal bancaria de Cangas de Onís y tratar de huir en un tiroteo en el que ha resultado herido un agente de la Guardia Civil, y en el que fue arrestado un segundo asaltante. Los hechos se produjeron poco después de las 9.00 horas en una sucursal bancaria de Liberbank situada en la avenida de Covadonga, en pleno centro de la capital canguesa.

Según detallaron fuentes de la Guardia Civil, fue una mujer que se disponía a entrar en la sucursal bancaria detrás de los atracadores la que dio el aviso al 112 al percatarse de la situación en la oficina.

Los dos atracadores, que habían salido hace poco de la cárcel y contaban con antecedentes por robos con intimidación, intentaron abandonar la oficina bancaria cuando en el exterior ya aguardaban varios agentes, contra los que comenzaron a disparar. Uno de los agentes recibió un balazo en un brazo por lo que tuvo que ser trasladado al hospital de Arriondas, aunque se encuentra fuera de peligro.

Los guardias civiles respondieron con disparos y lograron detener a uno de ellos, mientras que el otro volvió al interior de la sucursal, donde se atrincheró con tres rehenes, dos empleadas y un cliente.

Los agentes le facilitaron un teléfono móvil para ponerle en contacto con un negociador que le convenció de que dejara el libertad a los tres rehenes sobre las 12.00 horas. Los tres rehenes abandonaron la sucursal bancaria sin ninguna lesión, siendo evacuados a un centro de salud.

Pocos minutos después, se escuchó un disparo que procedía del interior de la sucursal de Liberbank, por lo un grupo de tres efectivos de la Guardia Civil entraron en la misma por una puerta trasera y hallaron el cuerpo inmóvil tendido en el suelo. Tras ser examinado por personal de UVI móvil que se encontraba en la zona, se comprobó que no había fallecido, a pesar de la gravedad de las lesiones, por lo que llevaron a cabo las labores de estabilización, falleciendo finalmente a las 13.15 horas.

El atracador detenido fue identificado como J. M. S. V., de 43 años y vecino de Burgos, mientras que el que se suicidó es J. C. S. G., de 59 años y domiciliado en la localidad burgalesa de Miranda de Ebro. El atraco generó una gran alarma entre los vecinos de la zona, algunos de los cuales se despertaron con el sonido de los disparos.

Un disparo en la fachada Una de las testigos, una clienta de la cafetería La Golosa, situada justo frente a la sucursal, relató que los dos atracadores habían salido de la oficina bancaria y uno de ellos comenzó a disparar contra los agentes, y que uno de los disparos impactó en la fachada de una confitería situada en en plena Avenida de Covadonga. De hecho, se contraron al menos trece casquillos lo que da muestra del drástico balance del intercambio de disparos entre los atracadores de la oficina bancaria de Cangas de Onís y los agentes de la Guardia Civil. Además, del disparo en la fachada de la confitería, otro impactó en el escaparate de una ferretería y otro más en la furgoneta de una carnicería , que en aquellos minutos transitaba por esa arteria de la ciudad canguesa.

Los agentes, mientras repelían el ataque y procedían a la detención de uno de los ladrones, pidieron a las personas que se encontraban en la cafetería, entre las que se encontraba la propia directora de la sucursal que estaba siendo atracada, que aguardaran en el interior del establecimiento.

Ante la situación de tensión generada por el atrincheramiento de uno de los atracadores armado y con varios rehenes, la Guardia Civil mantuvo durante varias horas un amplio cordón de seguridad para evitar que se acercaran curiosos. Una vez finalizada su actuación, los agentes recibieron el aplauso de los numerosos curiosos congregados en la zona.

La Guardia Civil de Asturias escribió en su cuenta oficial de twitter: “Un abrazo con deseos de pronta recuperación a Marcos, guardia civil de #Asturias herido de bala durante un atraco”. El agente herido fue trasladado al hospital de Arriondas tras ser atendido en el lugar de los hechos por una ambulancia de soporte vital básico de la zona. Poco después, el agente volvió al lugar del suceso. - Efe / E. Press