donostia - Un hombre intentó quitarse la vida a media tarde de ayer quemándose a lo bonzo en la plaza de José María Sert del barrio donostiarra de Benta Berri.

Los hechos sucedieron a las 18.05 horas, cuando testigos presenciales alertaron al teléfono de emergencias 112 de que un hombre “relativamente joven” se estaba bañando desnudo “como loco” en el estanque ubicado en la plaza de Sert.

Inmediatamente una patrulla de la Ertzaintza se trasladó hasta el lugar, donde los agentes pudieron comprobar que el varón presentaba abundante sangre en las manos, así como múltiples quemaduras por todo el cuerpo. “Tenía ampollas grandes por todo el cuerpo y se las intentaba rascar”, declararon algunos testigos.

Inmediatamente, los agentes solicitaron una ambulancia que, al comprobar la gravedad de las heridas, trasladó al hombre a la Unidad de Grandes Quemados del hospital de Cruces de Barakaldo, donde quedó ingresado.

La Ertzaintza inició entonces una investigación para tratar de esclarecer lo sucedido, después de intentar sin éxito entablar una conversación con el herido.

Según algunas informaciones, el hombre se habría rociado el cuerpo con alcohol en la misma plaza de José María Sert y prendido fuego.

Sin embargo, otros testigos relataron haberlo visto corriendo por la avenida de Zarautz procedente de la calle Aizkorri, al parecer, con unos cables colgando de su cuerpo. Esta última versión habría levantado las sospechas sobre un posible intento de suicidio mediante una descarga eléctrica.

En lo que todas las versiones coinciden es en que el suceso habría estado motivado por problemas psicológicos graves.

registro en su domicilio Los agentes de la Policía Vasca no tardaron en localizar el domicilio del hombre, en un piso de la calle Aizkorri del mismo barrio de El Antiguo.

El herido no portaba llaves de la vivienda, por lo que los ertzainas solicitaron la presencia de los Bomberos para acceder al piso, de cuyo interior “salía olor a carne quemada”.

Finalmente, en el registro del domicilio ni los Bomberos ni la Er-tzaintza localizaron “nada sospechoso” ni tampoco indicios de que se hubiera registrado un incendio previo en el piso.

Los agentes, asimismo, comprobaron que el herido tiene una hermana, con la que a última hora de ayer aún no habían conseguido contactar. La Ertzaintza trataba, asimismo, de localizar a más familiares con el objetivo de hacerles llegar la noticia del luctuoso suceso y conocer más datos sobre las causas que habrían podido desencadenarlo. - N.G.