DONOSTIA. Goia y el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, como máximos representantes de las instituciones que han sufragado casi 21 millones de euros, de los 32 que ha costado la nueva terminal -el resto lo ha puesto la constructora Murias, que la gestionará-, han presidido este mediodía el acto inaugural, junto a Marisol Garmendia y Pilar Arana, responsables de Movilidad del Ayuntamiento y la Diputación, respectivamente.

Concejales de todos los grupos políticos de la corporación municipal, representantes de las Juntas Generales del territorio y algunas personalidades destacadas de la ciudad, como el diputado socialista y exalcalde donostiarra, Odón Elorza, han asistido al evento, que ha concluido con la apertura al público de las nuevas instalaciones, que no comenzarán a funcionar propiamente hasta mañana.

El acto de hoy se ha celebrado después de que se hayan subsanado, mediante diversos cambios en rejillas de salidas y en el sistema de impulsión y extracción de humo, los problemas en caso de incendio grave en la zona de dársenas que fueron detectados unas horas antes de la inauguración oficial prevista para el pasado 15 de enero.

"Por fin los donostiarras tienen una estación de autobuses con un servicio que merecen y del que han carecido durante demasiado tiempo", ha destacado el alcalde, en referencia, no solo al contratiempo de la apertura, sino a los muchos años que Donostia lleva sin una estación de autobuses como tal, con la plaza de Pío XII como lugar de llegada y salida de vehículos y pasajeros.

De hecho, ha considerado que "ha sido una aventura larga en la historia de la ciudad", en la que "ha habido muchos protagonistas y se han escrito muchas páginas", por lo que ha agradecido la labor de "todos los que a lo largo de muchos años han trabajo para que sea hoy realidad".

Goia ha recordado que esta infraestructura es "una pieza muy importante de un puzzle más complejo y grande", el del "nuevo espacio de centralidad de la ciudad" que se ha formado en la zona de Atotxa, con la Estación del Norte, de Adif, donde está proyectada también la llegada del TAV, y el CICC Tabakalera.

El diputado general, Markel Olano, se ha mostrado asimismo "encantado" con la apertura de la instalación. "Ha costado -ha dicho Olano- y, precisamente por ello, nos hemos quitado un gran peso de encima".

El presidente del gobierno de Gipuzkoa ha recordado la importancia de poder disponer finalmente de una "modernísima" estación de autobuses, que además forma parte de un nudo intermodal de transporte, en un año como 2016, en que la ciudad es Capital Europea de la Cultura.

La moderna estación de autobuses de Donostia, con una superficie de casi 18.400 metros cuadrados, repartidos en una entreplanta y tres más, de aparcamiento, dispone de 21 dársenas, 9 de ellas accesibles para sillas de ruedas, así como de taquillas, consigna, cafetería y otras dependencias habituales.

Una media de 8.000 a 10.000 personas utilizarán al día el recinto, por el que circularán unos 500 autobuses diarios, de once compañías, que realizan trayectos a numerosos puntos del territorio, así como a las capitales y aeropuertos vascos, principales ciudades estatales y también conexiones internacionales con Europa y Marruecos.

El primer autobús que operará de la terminal será el que saldrá a las 5:00 horas de la próxima madrugada con destino a Loiu y el último que partirá del viejo emplazamiento de Pío XII lo hará a las 3 horas de mañana con destino a Biarritz.