BILBAO. El acuerdo extrajudicial, rubricado el pasado día 3, se ha entablado después de que la familia del fallecido reclamara por daños y perjuicios por la asistencia que recibió tras la operación en el Hospital Cruz Roja de Bilbao y después, en el Hospital de Galdakao, según ha informado El Defensor del Paciente.
La intervención para extraer al paciente la vesícula, una de las operaciones más comunes en los servicios de Digestivo de cualquier hospital, se practicó el 12 de septiembre de 2011 en el Hospital Cruz Roja de Bilbao, centro al que el hombre de 80 años fue derivado desde Osakidetza, en virtud de los convenios que la red pública vasca tiene establecidos con centros sanitarios privados.
En esa operación, que se desarrolló por laparoscopia, el cirujano hizo un corte en la arteria cística y, como ha reconocido el informe de inspección en el procedimiento de responsabilidad instado por la familia del fallecido, "resultó manifiestamente insuficiente el control postoperatorio del paciente".
En concreto, el hospital "no valoró adecuadamente el continuado descenso de la tensión arterial, sugestivo de hemorragia interna", y no fue evaluado el paciente en ningún momento ni por el equipo quirúrgico responsable de la intervención, según el mismo informe de parte.
Horas más tarde, el hombre tuvo que ser trasladado al Hospital de Galdakao, donde descubrieron el "hemoperitoneo masivo", junto con "hemorragia activa de la arteria".
l paciente falleció el 18 de septiembre como consecuencia del "cuadro de shock hipovolémico secundario a hemoperitoneo post colecistectomía laparoscópica".
La viuda y los hijos del vecino de Basauri fallecido reclamaron por la falta de atención que tuvo el paciente y ahora Osakidetza ha acordado otorgarles una indemnización por lo ocurrido, evitando que el asunto llegue a juicio.