Bilbao. El hombre que inventó el marcapasos hace más de medio siglo, el estadounidense Wilson Greatbatch, murió este martes en Búfalo (Nueva York) a los 92 años.

Thomas J. Hook, presidente de la compañía Greatbatch Inc., fundada por el inventor, informó en un comunicado de la muerte de Greatbatch, que se produjo en el centro asistencial donde había vivido durante los últimos años.

Ingeniero de formación, Greatbatch registró a lo largo de su vida más de 150 patentes, entre ellas la del marcapasos, que se implantó por primera vez con éxito en un ser humanos a comienzos de la década de 1960. En 1970 fundó la empresa Wilson Greatbatch Ltd., llamada ahora Greatbatch Inc., para fabricar baterías para los marcapasos.

Los marcapasos implantables construidos por el ingeniero Wilson Greatbatch se empezaron a usar desde abril de 1960 después de numerosas pruebas en animales. La innovación de Greatbatch sobre los primeros dispositivos suecos consistía en el uso de baterías de mercurio como fuente de energía. El primer paciente en recibir uno de estos marcapasos vivió mas de 18 meses.

Nacido el 6 de septiembre de 1919, se graduó en la Universidad Cornell y en la Universidad de Búfalo y es recordado como el inventor del marcapasos, a pesar de que su única hazaña fue mejorar y realizar avances sobre el primer marcapasos cardiaco implantable.

Actualmente era presidente de Greatbach Gen-Aid, corporación para la investigación y desarrollo de ingeniería genética aplicada a la medicina y a la agricultura. Su último proyecto estaba dirigido al control electrónico aplicado al crecimiento de los tejidos, control de infecciones, administración de medicamentos e ingeniería genética.