Bilbao. Cada año un buen número de estudiantes extranjeros se matricula en alguna de las Universidades de Budapest en las que desde 1983 se imparten programas internacionales en inglés y alemán. Los estudios de Medicina y Música son de los más valorados en Europa por la calidad de la enseñanza y de los profesores, lo que explica el interés de estudiantes de todo el mundo por participar en los programas internacionales de las universidades húngaras. Aprovechando este tirón internacional, la empresa vasca Kategora ha puesto en marcha la primera residencia de estudiantes en el centro de Budapest, que empezará a funcionar el próximo curso.

La idea de abrir esta residencia para estudiantes extranjeros surgió a petición de los propios universitarios que cada año se movilizan en busca de pisos de alquiler donde residir durante el curso. Comprobado que había una fuerte demanda de alojamiento por parte de los extranjeros que estudian en Budapest, los responsables de Kategora adquirieron un céntrico edificio de ocho plantas y lo transformaron en una residencia compuesta por 51 apartamentos con zonas ajardinadas, parking, gimnasio, comedor y servicios comunes.

Se trata también de la primera experiencia de esta empresa bilbaina en la dotación y gestión de un edificio destinado a albergar estudiantes universitarios. No obstante, tras curtirse en asesoramiento, intermediación y compraventa de inmuebles en Europa del Este, Kategora emprendió recientemente la actividad de gestión de apartahoteles, lo que le proporciona el know how necesario para asumir las tareas de hostelería que requiere el nuevo equipamiento.

Kepa Apraiz, director gerente de Kategora, apunta que "en los últimos años decenas de estudiantes españoles han pasado por la Universidad de Semmelweis de Budapest para aprovechar el elevado número de plazas disponibles". En comparación con otros países europeos, asiáticos y americanos, Hungría sigue sin ser un destino preferente de los estudiantes del Estado español, sin embargo, cada año crece su número, tanto para cursar carreras completas como para realizar el año Erasmus. En conjunto, este curso la Universidad de Budapest tiene matriculados unos 8.000 estudiantes extranjeros, de los que 1.200 estudian Medicina.

mucha demanda Respecto a la forma en qué surgió la idea de abrir esta residencia, Kepa Apraiz señala que "vimos una oportunidad de negocio porque en Budapest no existía una residencia de estudiantes céntrica y con buenos servicios, a pesar de que cada año más de 8.000 estudiantes extranjeros van a estudiar allí. Los propios estudiantes nos hicieron ver que un edificio de apartamentos que funcionara como residencia, con gimnasio, seguridad 24 horas, lavandería, servicios de limpieza, parking, etc. tendría demanda. Vimos una oportunidad, logramos el apoyo de la Universidad de Budapest y nos decidimos a abrir esta residencia, que está en el centro, a diez minutos andando desde la Universidad y con unas comunicaciones excelentes. El proyecto permite a Kategora comercializar y obtener una alta rentabilidad de una inversión inmobiliaria con recorrido y posibilidades de revalorización. Los propietarios de la residencia de estudiantes son los clientes de Kategora. Ellos compran los inmuebles y nosotros los gestionamos. Hay clientes que han comprado dos apartamentos, tres, uno... el 75% del edificio ya está vendido y eso que lo hemos lanzado hace apenas unas semanas".

Apraiz indica que su empresa ya tiene experiencia alquilando apartamentos a ese nutrido grupo de estudiantes extranjeros que cada año se matricula en las universidades húngaras. "Nuestros clientes -dice- vienen de Japón, China, Alemania, Turquía, Irán, Estados Unidos, tenemos inquilinos de todas las partes del mundo", que llegan atraídos por "el prestigio y las homologaciones de la Universidad".