Bilbao. El viceconsejero de Sanidad del Gobierno vasco, Jesús María Fernández, pudo comprobar ayer de primera mano la irritación del colectivo de trabajadores de la empresa pública Osatek, que depende de su departamento. Acompañado por Pablo Arbeloa, director gerente de la sociedad pública dedicada a realizar resonancias magnéticas y cuyo cliente es Osakidetza, Fernández inauguró un novedoso equipo de radiología en el Hospital de Galdakao-Usansolo. Coincidiendo con el acto oficial, el comité de empresa había convocado una huelga de cuatro horas de duración, que calificó de "éxito", ya que fue secundada por el 98% de la plantilla. A consecuencia de esta movilización laboral, durante cuatro horas no se realizaron las resonancias previstas en las ocho unidades que Osatek tiene repartidas en la Comunidad Autónoma Vasca.

El comité de empresa, compuesto en exclusiva por delegados de ELA-STV, explica la razón del paro en que Osatek está "llena de incertidumbres sobre su futuro y amenazada por la gestión de la nueva gerencia -en alusión a Pablo Arbeloa-, con recortes de personal los fines de semana y futuros recortes más drásticos, y reestructuraciones de plantilla a partir de enero de 2011".

Procedentes de todos centros que Osatek, un centenar de trabajadores se concentraron ayer en el hospital de Galdakao, portando una pancarta con el lema 18 años de calidad pública. ¡No al desguace de Osatek! Los sindicalistas trataron de entregar un escrito al viceconsejero y, aunque este aseguró que hablaría con ellos, finalmente no se produjo la reunión, según aseguró Iratxe Aguirre, miembro del comité.

Pese a que este año se debe negociar el nuevo convenio, Aguirre negó que los trabajadores de Osatek pretendan mejoras salariales. Todo lo contrario. "Ya hemos sufrido las bajadas que han impuesto a toda la Función Pública y sólo pretendemos que se mantengan los salarios, porque la dirección nos ha trasladado que quiere un convenio a la baja".

Buena situación El comité explicó que la situación económica de Osatek es "excelente, con resultados positivos durante estos 18 años que han permitido siempre la autofinanciación, sin reparto de dividendos ni subvenciones", y la reinversión de nuevos equipos de resonancia magnética. Añadió que, "gracias al trabajo y compromiso de los trabajadores de Osatek y a los resultados de este modelo de gestión", se ha podido inaugurar en Galdakao una resonancia magnética "de última generación, de 3 Teslas, la primera en Euskadi de sus características" y que tiene un coste de 1,7 millones.

Los representantes de los trabajadores alertaron de la creación de una nueva empresa, O-Sarean, gestionada por Arbeloa, cuya intención, según el comité, es "subcontratar a trabajadores a bajo coste". En este sentido, Aguirre señaló que "el nuevo gerente está volcado en ese nuevo proyecto y los trabajadores de Osatek no sabemos dónde encajamos".

Recientemente, varios partidos políticos han reclamado al consejero de Sanidad que investigue la contratación por parte de su departamento de empresas que tienen vinculaciones con dos altos cargos, siendo Pablo Arbeloa uno de ellos.