El Parlamento Vasco mira ya al futuro. Con un amplísimo consenso del 91%, los grupos han confirmado este jueves su respaldo a las bases educativas y, al mismo tiempo, el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, ha ratificado su intención de presentar una ley en octubre con "lealtad" a lo pactado por PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU. El grado de concreción de estas bases garantiza, en teoría, que este consenso se mantenga en los siguientes pasos para desarrollar la ley. Se avanza sobre terreno firme. Las bases recogen medidas contra la segregación del alumnado migrante y vulnerable, condicionan la inversión pública para la red concertada a que las escuelas cumplan una serie de requisitos como la paridad y la transparencia, y fijan como objetivo que los alumnos tengan un nivel B2 en euskera al terminar la secundaria.

En contra de este consenso volvieron a situarse PP+C's y Vox, pero los destellos de crispación que introdujeron en el debate no empañaron la fotografía. Desde el PNV, Leixuri Arrizabalaga consideró que el Parlamento asiste a un momento "extraordinario"; puso en valor la apuesta por la escuela inclusiva, plurilingüe y gratuita con el euskera como eje y atendiendo al contexto sociolingüístico, y destacó que este nivel de acuerdo va a garantizar que la ley perdure en el tiempo."Con la votación no se termina el camino; esta ha sido la primera parada y, como hasta ahora, espero seguir trabajando desde la honestidad, el respeto y el diálogo con todos los agentes de la comunidad educativa y con los grupos políticos", alentó.

Desde EH Bildu, Ikoitz Arrese concedió valor a que este acuerdo fije medidas concretas para evitar la segregación y acabar con la concertación universal. Además, consideró que "hoy estamos más cerca que ayer de la inmersión lingüística", y que se ha dado "un salto para la transformación educativa".

Desde el PSE, Eneko Andueza trató de poner en relieve el papel de su grupo y lanzó un agradecimiento simbólico a referentes socialistas como Fernando Buesa y José Ramón Recalde. En cualquier caso, trató de marcar perfil con el idioma diciendo que la escuela no debe servir para aprender una lengua, sino que esa lengua debe ser un instrumento para aprender, aunque el debate no fue más allá y tampoco se dejó arrastrar por la "provocación" de PP+C's. Este grupo y Vox agitaron el discurso de los ciudadanos de primera y segunda por el euskera. La llegada de Feijóo al PP no se hace notar aún en Euskadi.

PAPEL HIGIÉNICO EN LAS ESCUELAS DEL PP Y C'S

José Manuel Gil (C's) pidió que cada lengua tenga al menos una presencia del 25% como en la sentencia contra la inmersión catalana, y acusó a los grupos de incumplir el reglamento parlamentario. Andueza lo despachó con una frase: "La ciudadanía de segunda se genera con la moderación salarial, o cuando no hay papel higiénico en las escuelas, en comunidades que gestiona su partido". En Elkarrekin Podemos-IU, Miren Gorrotxategi volvió a apostar por la escuela pública y ensalzó el acuerdo. Se mantendrá vigilante para que se cumpla.

Bildarratz redactará la ley que sustituirá a la de 1993 y consideró que el Parlamento "nos ha dado una lección a todos". Garantizó que contará como "hasta ahora" con los agentes educativos.

El sindicato Steilas mostró su rechazo con un paro de media jornada en las escuelas públicas y varias movilizaciones. El llamamiento, que no secundaron ELA, LAB y CCOO, alcanzó el 40%, según sus cifras. Cree que en este pacto la escuela pública no será el eje.

AIRES POST COVID EN EL PARLAMENTO

Por otro lado, el Parlamento Vasco ha comenzado su propia desescalada ante el coronavirus, permitiendo que los oradores suban a la tribuna a intervenir sin mascarilla. Tampoco se ha visto ya a los trabajadores de la Cámara desinfectando la tribuna entre uno y otro turno de intervención.