- Como ya adelantó el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, en la entrevista concedida a este periódico en puertas del Aberri Eguna, la intención del PNV es recuperar la actividad política en general en otoño si el virus se estabiliza, y esa intención incluye la Ponencia de Autogobierno. En ese sentido, el PNV reiteró ayer en Radio Euskadi su intención de reactivar la ponencia parlamentaria porque “no es una aventura incierta” y está “en su ADN” conseguir y acordar un nuevo estatus político para Euskadi. El PSE, su socio en el Gobierno vasco (aunque ambas partes se dejaron libertad en este asunto en su acuerdo de legislatura), puso ayer en duda la utilidad de la ponencia y planteó la posibilidad de que se plantee el debate a través de una proposición de ley. Ortuzar ya planteó en la entrevista con DEIA dos posibilidades: continuar los trabajos con la base del texto de los juristas, o que un partido asumiera el liderazgo registrando una proposición de ley, una tarea que el PNV no rehuye y donde está dispuesto a dar el paso. Ortuzar se declaró dispuesto a realizar cualquiera de los dos ejercicios.

En la tertulia de parlamentarios vascos en Radio Euskadi, los representantes de los distintos grupos se refirieron a los resultados del Sociómetro conocidos esta semana y a la interpretación de que se ha detectado un incremento de las personas que abiertamente se oponen a la independencia. La parlamentaria de PNV Leixuri Arrizabalaga afirmó que no cree que sea “tan significativo” ese resultado si se tiene en cuenta que, en la actualidad, las fuerzas abertzales tiene una “mayoría abrumadora” y son fuerzas que trabajan “día a día por esa consecución de la independencia, de una Euskadi libre en Europa”. Aclaró que a su partido le preocupa la situación sanitaria y socioeconómica y seguirá siendo una prioridad, pero añadió que está “en su ADN” conseguir y acordar un nuevo estatus político para Euskadi y, por tanto, está entre sus prioridades y puede ir de “la mano” con el resto de prioridades.

Dijo que la ponencia se “reactivará”. Añadió que no es “una aventura incierta” y no es “crear problemas”, sino trasladar la propuesta en el seno del Parlamento Vasco. Por último, insistió en el total respeto a la voluntad expresada por la sociedad, que “decidan qué es lo que quieren”. Recordó que un 67% de los ciudadanos vascos se muestran a favor del derecho a decidir.

El parlamentario de EH Bildu Mikel Otero, por su parte, aseguró que, una vez conocidos los datos del Sociómetro, se ha hablado más “de algunas interpretaciones que se han hecho respecto al rechazo a la independencia”. “Un estudio del laboratorio de ideas Telesforo Monzón refleja que hay un consenso muy amplio a favor del derecho a decidir, que llega al 71%, ocho puntos más que en 2020”, destacó.

Desde el PSE, el parlamentario del Ekain Rico dijo que la sociedad está “más centrada que algunos grupos” y detecta como principales problemas los relacionados con el mercado de trabajo y salud. Rico aseguró que la apuesta del PSE es centrarse en los problemas de la gente y, si otros quieren hacerlo “en otros temas”, tienen “libertad para hacerlo”. Los socialistas no van a “rehuir ningún debate”, pero no es su prioridad y “tampoco de los ciudadanos”. “No quieren abordar aventuras. Se habla de ponencia. Yo me haría una pregunta, ¿ponencia para qué? En primer lugar la ponencia no existe, habría que crearla, en la pasada legislatura se creo una ponencia para elaborar un texto articulado, pues resulta que hay dos textos articulados; quien quiera abordar este tipo de cuestiones me parece que lo más natural es que las plantee como proposición de ley”, dijo. Elkarrekin Podemos-IU no se opone al derecho a decidir pero pone la prioridad en cómo gestionar lo público. PP+C’s dijo que este debate divide.

“Los socialistas no vamos a rehuir ningún debate, pero no es la prioridad ciudadana”

Parlamentario del PSE