El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha asegurado que el Gobierno vasco retrasó "todo lo posible" el cierre de la hostelería porque es consciente de que esta es una decisión "dolorosa" y que tendrá consecuencias económicas, pero ha subrayado que es necesario anteponer "el bien mayor de la salud pública" a cualquier otra consideración, y ha advertido de que, dada la expansión de la pandemia, es necesario adoptar medidas y actuar con responsabilidad "para evitar el confinamiento general y el colapso sanitario".

Urkullu ha respondido de esta forma, en el pleno de control que celebra este viernes el Parlamento Vasco, a una pregunta de EH Bildu sobre las medidas que tiene previsto adoptar el Gobierno autonómico para compensar a la hostelería por el perjuicio económico que ha causado el cierre decretado para el sector como medida para tratar de contener el avance de la pandemia.

CIERRE DE LA HOSTELERÍA EN EUSKADI

En su respuesta, el lehendakari ha asegurado que el Gobierno vasco retrasó "todo lo posible" el cierre de la hostelería porque es consciente de que esta es una decisión "dolorosa" y que tendrá consecuencias económicas. No obstante, ha explicado que si decretó el cierre fue porque era necesario anteponer "el bien mayor de la salud pública" a cualquier otra consideración.

Además, ha recordado que Euskadi se encuentra en el escenario más grave previsto en el plan de actuación frente a la pandemia ('Biziberri II'), y ha advertido de que, dada la expansión del coronavirus, es necesario adoptar medidas y que todos los ciudadanos e instituciones actúen con responsabilidad. "Está en nuestra mano evitar el confinamiento general y el colapso sanitario", ha dicho.