El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha justificado este jueves la necesidad de mantener en la Comunidad de Madrid el estado de alarma y las medidas para limitar la movilidad de la capital y otros ocho municipios porque la situación es "muy inestable y muy frágil", y no se puede "bajar la guardia", aunque ha confiado en poder controlar la situación en los 15 días en los que estará vigente el decreto.

Además, ha reclamado la necesidad de que todas las administraciones trabajen "juntas" y "con la mayor unidad posible", porque "no es tiempo de provocaciones ni de divisiones". "No es tiempo de distraernos en disputas estériles", ha avisado.

Así lo ha asegurado durante el Pleno del Congreso para informar de esa decisión que adoptó el Gobierno el pasado viernes en un Consejo de Ministros extraordinario de declarar el estado de para tratar de frenar la expansión del coronavirus, reponiendo las medidas que fueron tumbadas por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

Además, el ministro de Sanidad ha asegurado que no se pueden normalizar las cifras de incidencia acumulada que se están registrando y ha advertido de que solo se podrá doblegar la curva si se logran incidencias alrededor o por debajo de los 100 casos por 100.000 habitantes.

Sánchez tenía cita este jueves para asistir a un Consejo de la Unión Europea y su ausencia fue uno de los argumentos esgrimidos por el Gobierno para delegar este debate parlamentario en el titular de Sanidad.

En el banco azul del gobierno sí estaban al inicio del debate la vicepresidenta Carmen Calvo y los ministros Fernando Grande-Marlaska (Interior), Isabel Celaá (Educación), Yolanda Díaz ((Trabajo) y Carolina Darias (Política Territorial), José Manuel Rodríguez Uribes (Cultura) y Alberto Garzón (Consumo).

Tampoco estaba el presidente del PP, Pablo Casado, que al igual que Sánchez tenía un viaje en Bruselas, en su caso para asistir a una cumbre el Partido Popular Europeo.

El hemiciclo, como viene ocurriendo desde el inicio de la crisis del coronavirus, sigue semivacío siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias. Actualmente, el acuerdo de los grupos es que no asista más del 50% de los diputados de cada formación.

COMPARECENCIA SIN VOTACION

Se trata de una comparecencia informativa pero sin votación, ya que el Congreso sólo debe pronunciarse en el caso de una eventual prórroga del estado de alarma si se considera necesaria más allá de los 15 días para los que ha sido inicialmente declarado.

El pasado mes de marzo, cuando se declaró el estado de alarma derivado del coronavirus, fue el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el que informó al Congreso de sus pormenores e hizo lo propio con las diferentes prórrogas solicitadas.