El nuevo consejero de Educación del Gobierno vasco, Jokin Bildarratz, se abrió ayer a alcanzar consensos en Educación y prometió trabajar “de la mano” de la comunidad educativa para tratar de garantizar que el curso escolar pueda desarrollarse con las debidas condiciones de “seguridad” frente al coronavirus.

Bildarratz destacó que para que la enseñanza resulte “verdaderamente exitosa”, es necesario que los alumnos “sean felices y disfruten”. No obstante, indicó que, dada la situación actual, uno de los objetivos básicos ha de ser garantizar la “seguridad” en las aulas frente al covid-19.

El consejero entrante afirmó que para lograr esa meta, es necesario que el Gobierno vasco y la comunidad educativa trabajen “de la mano”. Aseguró además que el “único norte” de su labor al frente de Educación será el de trabajar por el bien de los alumnos. “El futuro de nuestro país y de nuestra sociedad tendrá su base principal en la educación”, añadió.

Por su parte, el consejero de Cultura y nuevo portavoz del Ejecutivo, Bingen Zupiria, abogó por “fomentar la colaboración institucional” para poder desarrollar “de forma adecuada” las tres competencias de su departamento: la cultura, la política lingüística y el deporte.

“El futuro de nuestro país tendrá su base principal en la educación”

Consejero de Educación