Bilbao - Idoia Mendia, secretaria general del PSE, precisó ayer que la propuesta de acercamiento de los presos de ETA planteada por el secretario de Derechos Humanos y Convivencia, Jonan Fernández, es "una propuesta personal" y no ha sido debatida en el seno del Ejecutivo vasco, por lo que no es "una propuesta del Gobierno". Asimismo, defendió que "cada preso tiene que iniciar el camino de la reinserción de manera individualizada" y partir del reconocimiento del daño causado. Sin embargo, el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka, aclaró que no es algo nuevo, sino que, tal como señalaba ayer este diario, es una actualización del planteamiento que el lehendakari Urkullu trasladó a Mariano Rajoy y posteriormente a Pedro Sánchez. Erkoreka, además, aseguró que la necesidad de "introducir modificaciones" en la política penitenciara es una "cuestión compartida" por PNV y PSE, los dos socios del Ejecutivo vasco.

Tras la polvareda que levantaron las declaraciones de Jonan Fernández en las que daba cuenta de la propuesta de acercamiento de los presos a cárceles de Euskadi o cercanas a la Comunidad Autónoma Vasca, desde del PSE se convocó a una rueda de prensa urgente para especificar la postura de los socios del PNV en el Ejecutivo. Y la posición del PSE fue clara a tenor de las palabras de Mendia. Los socialistas se desmarcan de una propuesta que, según su líder, solo conocen por los medios de comunicación. Por ello, Mendia pidió tiempo para poder "estudiar y trabajar" la propuesta con el fin "poder seguramente acordar" porque, recordó, "en anteriores ocasiones, se ha acordado con el PNV cuestiones relativas a la política penitenciaria y sobre cómo hacer un final ordenado del terrorismo en Euskadi y España". Además, Mendia apuntó que la situación penitenciaria de cada preso hay que analizarla de una forma individual. "Cada preso tiene que iniciar ese camino de reinserción de manera individualizada", reiteró.

Cuestión compartida A esta cuestión se refirió también el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, que aclaró que el plan de acercamiento de presos de ETA "no es nuevo", sino que es una actualización del plan que el lehendakari Urkullu hizo a Mariano Rajoy y después a Pedro Sánchez. En una entrevista en ETB, Erkoreka señaló que el acercamiento de los presos se trata de un "asunto de derechos" y que existe jurisprudencia que apunta a que los reclusos "en todo el mundo" tienen "derecho a una vida familiar", por lo que si se les aleja mucho de sus familias, esos derechos pueden resultar vulnerados. Además, se reafirmó en que la necesidad de introducir modificaciones a la política penitenciaria del Gobierno español es algo compartido por PNV y PSE.

Por su parte, Jonan Fernández, insistió ayer en que el Gobierno vasco nunca ha vinculado el acercamiento de los presos de ETA a que hagan una crítica de su pasado, pero cree "necesario" que los reclusos realicen esa reflexión sobre el daño causado a la sociedad. En declaraciones a Euskadi Irratia, Fernández aseguró que el planteamiento en el que están trabajando se asemeja al que ha hecho el Gobierno francés, que ha acercado a los reclusos en sus cárceles a prisiones próxima a Iparralde. "Lo que proponemos no difiere con lo hecho por el Gobierno francés, que ha acercado a la mayoría de los presos con el beneplácito de las asociaciones de víctimas", remarcó.

De momento, desde la Secretaría de Derechos Humanos se está perfilando el plan, una propuesta que todavía no está confirmada a quien será enviada aunque hay tres posibles destinatarios: Pedro Sánchez, el ministro Marlaska o Ángel Luis Ortiz, secretario de Instituciones Penitenciarias.