AZPEITIA. Entre las autoridades que se han desplazado a Azpeitia, se encontraban además la consejera María Jesús San José; la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; el diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano; el vicepresidente de las Juntas Generales de este territorio, Ernesto Merino, y la alcaldesa del municipio, Nagore Alkorta.

Todos ellos han participado en la tradicional comitiva previa a la misa solemne que se celebra cada año en la basílica de Loyola, que ha sido presidida por el obispo de Donostia, José Ignacio Munilla.

Arantxa Tapia ha hecho, en declaraciones a los periodistas, un llamamiento a "todas las instituciones" vascas a hacer "un frente común" para exigir al Ejecutivo central que impulse las infraestructuras y planes industriales comprometidos porque "la falta de Gobierno" en España "está afectando de forma directa" al desarrollo económico de Euskadi.

Para la consejera, la economía vasca "mejora" y "se está generando empleo", pero se encuentra inmersa en "un contexto no exento de dificultades", entre las que ha citado el retraso en la conformación de un Gobierno estable en España.

"Nos está afectando, desde el punto de vista de las infraestructuras desde luego -ha dicho-, pero también por la carencia de un plan industrial, de una política industrial potente, basada en el desarrollo de la I+D+I".

Unas infraestructuras con buenas conexiones deben "estar desarrolladas" para que la industria vasca "continúe siendo competitiva", ha señalado Tapia, quien ha indicado que esto afecta al TAV, "que requiere un impulso definitivo" para su llegada a Gasteiz y Bilbao -Donostia depende del ejecutivo autonómico-, pero también a otro tipo de "conexiones ferroportuarias".

Al término del desfile de autoridades, los representantes institucionales han asistido a la misa oficiada por Munilla en la basílica de Loyola, frente a la cual se han concentrado representantes de la asociación de familiares de presos de ETA, Etxerat.

El representante de Etxerat, Naike Díez, hijo del exsecretario general de LAB, Rafa Díez, se ha referido, en declaraciones a los medios de comunicación, a la polémica generada con los recibimientos a etarras cuando salen de prisión.

Díez ha opinado, en este sentido, que "hay tareas" más urgentes que este debate "político mediático" ya que, a su juicio,"el siguiente paso" tiene que ser el fin de la "política penitenciaria de excepción".

Naike Díez ha criticado, por otra parte, que la petición realizada hace un año por Etxerat para reclamar una reunión con el lehendakari, Iñigo Urkullu, no haya recibido aún respuesta.