París. El miembro de ETA José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera, ha recurrido las dos condenas que la justicia francesa había dictado contra él en rebeldía, cuando estaba en la clandestinidad, por lo que los dos juicios se repetirán este mes de junio.

Josu Ternera, que fue detenido el pasado 16 de mayo en la localidad de Sallanches, en los Alpes franceses, e ingresó en la cárcel al día siguiente en París, comparecerá en primer lugar el 19 de junio ante el Tribunal de Apelación de París, indicaron este lunes a Efe fuentes judiciales.

Ese día está programado que se celebre el proceso por el sumario que el 1 de diciembre de 2010 condujo a su condena a siete años de cárcel por pertenencia a ETA teniendo en cuenta su papel como dirigente de la banda.

Fue sentenciado entonces junto a su hijo Egoitz, al que el Tribunal de Apelación de París -la Fiscalía había recurrido la decisión en primer instancia- impuso cuatro años de cárcel.

El 19 de junio también se examinará otro recurso que ha formalizado Urrutikoetxea contra su ingreso en prisión provisional.

Además, el 28 de junio comparecerá ante el Tribunal Correccional de París que le juzgará por los hechos por los que el 1 de junio de 2017 lo condenó a ocho años de cárcel por su papel como miembro del aparato político de la banda entre 2011 y 2013, que incluye, sobre todo, el periodo en que estuvo en Noruega hasta ser expulsado por ese país.

Josu Ternera había acudido a Noruega junto a otros dos destacados miembros de esa estructura, Iratxe Sorzábal y David Pla, para intentar abrir una negociación con el Gobierno español, que lo rechazó.

Por otro lado, la Audiencia Nacional de Madrid ha solicitado a Francia su entrega para ser enjuiciado por el atentado de 1987 contra la casa cuartel de Zaragoza en el que murieron once personas, entre ellas seis menores.

Esa demanda será abordada por la sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París, aunque todavía no se conoce en qué fecha.

Urrutikoetxea Bengoetxea fue sentenciado una primera vez en Francia a diez años de cárcel tras su arresto en Bayona en enero de 1989.

Cuando cumplió esa pena, fue entregado en 1996 a España, donde fue elegido parlamentario vasco en 1998 en las listas de Euskal Herritarrok, quedó en libertad en 2000 y dos años más tarde pasó a la clandestinidad, hasta el 16 de mayo pasado.