bilbao - Oriol Junqueras emplazó ayer al presidente en funciones del Gobierno español, Pedro Sánchez, a que ofrezca garantías de que el diálogo que necesariamente han de mantener en los próximos años para encauzar el conflicto político catalán tenga sustancia democrática más allá de las apelaciones al diálogo y los gestos de buena voluntad. Desde la cárcel de Soto del Real en donde se encuentra como preso preventivo por la causa del procés independentista, el principal dirigente de ERC restó importancia a que un político catalán presida el Senado como pretende el líder del PSOE, que ha propuesto para el cargo a Miquel Iceta. A su juicio, la nacionalidad del presidente de la Cámara alta es irrelevante frente a su “convicción democrática” y la de quien le ha ofrecido la encomienda.

En una videoentrevista realizada ayer por El Periódico el exvicepresident de la Generalitat señaló desde la cárcel que carece de importancia que sea un catalán el que ocupe la presidencia del Senado, en referencia a Iceta, secretario primero del PSC. “Lo que importa no es de dónde venga cada uno, sino cómo encara el momento político actual. A lo que nosotros aspiramos es a hallar demócratas para dialogar de democracia y política. Es irrelevante que el presidente del Senado sea catalán o no”, respondió a la pregunta sobre la relevancia de que un catalán estuviera al frente de la Cámara legislativa que, si se diera el caso, está llamada a activar el artículo 155 de la Constitución que suspende las principales instituciones autonómicas.

En este sentido, el dirigente de Esquerra encarcelado desde hace más de año y medio junto a una decena de exconsellers del Govern añadió que el independentismo catalán está abierto a hablar con todo el mundo. “Lo que pedimos al PSOE es que piense que esta figura [la de presidente del Senado] será muy importante para el diálogo. No es cuestión de identidad nacional sino de convicciones democráticas”, precisó.

Esta condición debería suponer un cambio de actitud del próximo Gobierno que liderará Sánchez en relación a la cuestión de Catalunya, una profundización del diálogo y una mesa bilateral para abordar la autodeterminación de Catalunya en un plazo no determinado, sin precipitaciones pero sin dilaciones.

Iceta no es senador, condición necesaria para poder ser elegido presidente de esa Cámara. El PSOE tiene mayoría absoluta en el Senado y no tendría problema para su designación como presidente en la sesión de constitución de la Cámara que se celebrará el 21 de este mes. Pero para ello necesita ser senador y la única vía que le queda es que el Parlament catalán le designe como senador autonómico en sustitución de Montilla, que ya ha renunciado al cargo.

Iceta necesita una mayoría absoluta del pleno del Parlament en la votación del próximo jueves. De momento no lo tiene garantizado ya que Ciudadanos, ERC y JxCat no han aclarado si apoyarán a Iceta. Los republicanos catalanes piden gestos al PSOE y el partido de Puigdemont recuerda cuando se le pregunta sobre esto que Iceta y los socialistas apoyaron el 155 en Catalunya.

La semana pasada Pedro Sánchez avisó a los independentistas que el bloqueo a la opción de Iceta sería “un mal comienzo” para el diálogo entre Madrid y Barcelona. En este sentido, la ministra en funciones de Política Territorial, Meritxell Batet, reclamó ayer que el Parlament vote a Iceta como senador para que luego pueda presidir el Senado, y cargó contra ERC y C’s, a los que acusa de hacer “la misma pinza de siempre” contra el diálogo y la búsqueda de soluciones.

En un acto de campaña del PSC de Barcelona, lamentó que estos dos partidos “rompen el mínimo sentido institucional” al no garantizar los votos a Iceta, y recordó que republicanos y naranjas votaron a favor de sus respectivos candidatos a senadores por designación autonómica la última vez que se votaron en el Parlament. Se refiere a la última votación de senadores autonómicos, el 4 de mayo de 2018: los candidatos de todos los partidos -Cs, ERC, JxCat, PSC y Comuns- salieron adelante con el voto a favor de todos los grupos excepto las cuatro abstenciones de la CUP.