MADRID. El agente de la Guardia Civil que estuvo al frente de las pesquisas abiertas en marzo de 2017 por el juzgado de instrucción 13 de Barcelona para investigar los preparativos del referéndum ha explicado en el Supremo que en los días previos al 19 y 20 de septiembre había habido manifestaciones, pero de un tono menor porque "se pensaba" que la labor de los investigadores era "de poca entidad para impedir el referéndum".

Ha recordado que hasta ese momento se producían concentraciones puntuales a las puertas de su cuartel y cuando los agentes inspeccionaban almacenes, que cambiaron "a raíz de los hechos del 19 y del 20 de septiembre".

El día 19 la Guardia Civil hizo una importante intervención en Unipost para intervenir cartas electorales y "ahí ya fue un golpe duro", ha opinado.

Luego, el 20 de septiembre se llevaron a cabo diferentes registros como el de la Conselleria de Economía y "a partir de ahí ya se incrementaron las concentraciones". El "clima que se vivía" y el que los guardias civiles tenían en cuenta para planear futuras intervenciones era, ha añadido, "claramente insurreccional".

A preguntas de la fiscal Consuelo Madrigal, el teniente ha explicado que ese clima cambió cuando se aplicó el artículo 155 en Catalunya.

"La constatación de que el clima insurreccional ya no se producía" es que, según ha dicho, de las 88 acciones que se produjeron contra la Guardia Civil en todo ese periodo, dos tuvieron lugar hasta el día 19 de septiembre y solo otras dos a partir de la aplicación del 155.