MADRID. Los convocantes, que esperaban 50.000 manifestantes, han cifrado en 120.000 los asistentes. En torno a las 19.30 horas, la Delegación del Gobierno ha señalado que han sido 18.000 los participantes, de acuerdo a los datos policiales.

Cuando la cabecera entraba en la Plaza de Cibeles, donde se ha levantado un escenario con el lema 'La autodeterminación no es delito', la cola de manifestantes llegaba hasta prácticamente la Plaza Emperador Carlos V, junto a la estación de Atocha, según ha comprobado Europa Press.

"Uno de octubre, ni olvido ni perdón"; "este juicio es una falsa"; "hemos venido a despedirnos" o "prensa española, manipuladora" ha sido algunas de las consignas más repetidas durante la manifestación, en la que las banderas más repetidas eran las 'esteladas' y la de morada de Izquierda Castellana. También se han visto pancartas con lemas como "no pasarán", "no hay justicia" y "libertad presos políticos".

TORRA Y LOS "GRITOS DE LIBERTAD"

En la cabecera se encontraban el president de la Generalitat, Quim Torra, el expresidente Artur Mas y varios de los actuales miembros del Govern, entre ellos Elsa Artadi, así como el presidente del Parlament, Roger Torrent. También había diferentes políticos de partidos independentistas catalanes como Gabriel Rufián, Joan Tardá, Josep Lluís Cleríes.

En declaraciones a la prensa, Torra se ha dirigido de forma genérica a España para pedirle que escuche "los gritos de la libertad" y que aproveche la manifestación para preguntarse "en qué ha fallado para que tanta gente esté apelando el derecho de la autodeterminación".

Por parte de los Comunes, la marca de Podemos en Catalunya, el representante ha sido Gerardo Pisarello, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona que preside Ada Colau. Han respaldado el acto representantes de sindicatos como el SAT, de partidos como EH Bildu o plataformas como Altsasu Gurasoak, que apoya a los condenados por agredir a los guardias civiles en Altsasa en 2016.

La periodista Patricia López ha abierto las intervenciones con un minuto de silencio por las víctimas del atentado "neonazi" en Nueva Zelanda. Durante ese momento, se ha oído a una persona gritar "viva España", lo que ha merecido alguna leve reprobación de los manifestantes. "No vamos a renunciar jamas al derecho a la autodeterminación ni a los derechos civiles", ha dicho la presentadora.

Antes de comenzar sus discursos la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, y el vicepresidente de Omnium Cultural, Marcel Mauri, se ha proyectado un vídeo del juicio en el Tribunal Supremo a los líderes del 'procés' acusados de los delitos de rebelión, sedición y malversación. Los manifestantes han vitoreado las frases de los presos preventivos y han abucheado los cortes en los que aparecían los fiscales.

A las 17.00 horas, una decena de alcaldes independentistas ha cantado vara en mano el himno del Segadors en el edificio de la Bolsa y luego han recibido el aplauso de las cientos de personas que se amontonaban en la cabecera de la manifestación, que lleva por lema 'La autodeterminación no es delito. Democracia es decidir'. También han asistido a la manifestación abogados luciendo la toga negra característica de este colectivo, entre ellos Gonzalo Boyé, que defiende al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.

Unos 500 policías han velado por la seguridad de la manifestación en Madrid, según fuentes policiales. Las calles adyacentes al Paseo de Recoletos se encontraban acordonadas por agentes de la Policía Municipal y de la Policía Nacional.

Preguntados por Europa Press, algunos asistentes a la manifestación han señalado que no han tenido incidentes relevantes en la previa. Tan sólo un grupo ha comentado que una señora mayor les ha hecho una 'peineta' y les ha gritado "golpistas" por las calles cercanas al parque de El Retiro.