BILBAO - Perú recuerda este mes de agosto la visita del lehendakari José Antonio Aguirre, de la que se cumplen 75 años. Así, con motivo de este aniversario, la asociación Arantzazu Euzko Etxea de Lima ha organizado una serie de actos conmemorativos y académicos por todo el territorio peruano para homenajear la figura de Aguirre en un país con una amplia comunidad de origen vasco.

El lehendakari en el exilio llegó a Perú en el marco de una extensísima gira realizada en 1942 por diferentes países americanos que le llevó a Guatemala, Panamá, México, Argentina, Uruguay, Venezuela, Colombia, Brasil, Bolivia, República Dominicana, Cuba y Chile. Aguirre fue recibido a su llegada a Lima por el edecán del Gobierno peruano y trasladado al palacio presidencial, donde mantuvo una reunión con el presidente Manuel Prado Ugarteche, descendiente directo de una de las familias más antiguas y representativas de la comunidad vasca peruana. Posteriormente fue homenajeado en las cámaras de diputados y senadores del Congreso y fue recibido como huésped de honor en la Universidad de San Marcos, la más antigua del continente americano.

En las actas institucionales que se conservan referentes a la visita, los congresistas peruanos, en su mayor parte de origen vasco, hablaban de José Antonio Aguirre con auténtica veneración y lo describían como un luchador por la libertad. Como ejemplo, la intervención del diputado Uranga Elejalde, para quien Aguirre era “una de las figuras que constituyen el símbolo de la democracia en la hora actual y que tan esforzadas y heroicas luchas librara en España”. En términos similares se expresaron los diputados Urquieta y Gorriti, que definieron al lehendakari en el exilio como “irreductible en su pasión por la libertad” y un “gran católico que luchó por la causa democrática”.

En la misma gira de 1942, el lehendakari fue recibido también, entre otros, por los presidentes de Argentina, Uruguay y Colombia. Estos viajes de José Antonio Aguirre por toda América se producían en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, durante la que el Gobierno vasco realizó un gran esfuerzo de propaganda para dar a conocer su causa a nivel internacional, convencido de que una victoria de los aliados en el conflicto pondría fin también al régimen de Franco.

Respecto a los actos conmemorativos, la asociación Arantzazu Euzko Etxea destaca que se está editando un número especial de la revista Oiga, fundada por el periodista de origen oñatiarra Francisco Igartua Rovira, donde se publicará información inédita de la visita de Aguirre al país latinoamericano. Además, hay previstas actividades académicas, artísticas, sociales y religiosas en nueve regiones peruanas: Lima, Arequipa, Cusco, Loreto, San Martín, La Libertad, Ancash, Cajamarca y Piura. Para ello, los organizadores han contado con la ayuda del departamento de Vínculos y Relaciones Atlánticas de la UPV/EHU.

El acto final de este 75 aniversario se celebrará el día 30 de agosto en la capital peruana y consistirá en la siembra de un retoño del Árbol de Gernika en la nueva sede de la Arantzazu Euzko Etxea, asociación fundada en 1612 que agrupa a los vascos en Lima. Este roble se sumará a los más de 60 retoños repartidos por todo el planeta. Uno de los más recientes ejemplares fue el plantado en abril por Iñigo Urkullu en Auschwitz como símbolo de paz y convivencia.