Jerusalén - Un segundo ataque con arma de fuego, el tercero en el día contra fuerzas de seguridad israelíes, elevó ayer aún más la tensión en la zona, donde varios soldados resultaron heridos y un atacante árabe israelí fue abatido en Jerusalén.
El Ejército de Israel informó ayer de que un soldado israelí resultó levemente herido por disparos, en el tercer ataque de la jornada, y calificó al autor, que se dio a la fuga, como "terrorista", lo que engloba el incidente en el marco del conflicto palestino-israelí.
Este incidente se suma a un primer atropello presuntamente intencionado contra un grupo de soldados israelíes en Jerusalén, que dejó doce heridos, tras el que el conductor del vehículo también se dio a la fuga.
Más tarde, un ciudadano árabe de Israel abrió fuego contra un grupo de policías en la Ciudad Vieja de Jerusalén tras lo que fue abatido. Además, dos palestinos -un joven de 19 años presuntamente armado y un oficial de la Policía palestina- perdieron la vida ayer en enfrentamientos contra el Ejército israelí en Cisjordania ocupada. Ayer jueves otro palestino también murió por disparos israelíes durante unas protestas en Hebrón contra la propuesta de paz presentada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
peligrosa escalada La oficina del presidente palestino, Mahmud Abás, describió ayer la situación como "una peligrosa escalada" y la vínculo los episodios a la iniciativa de Trump, que ha disparado la tensión en la zona.
Los palestinos han rechazado la llamada Visión de Paz de Trump y desde la semana pasada se suceden protestas que hasta ahora no han sido masivas pero que han derivado en enfrentamientos contra las fuerzas de seguridad israelíes. La inestabilidad también ha vuelto a la frontera entre Israel y la Franja de Gaza, donde se han registrado ya cinco jornadas con disparos de proyectiles y bombardeos israelíes de represalia.
Para los palestinos, el plan de paz está alineado con los intereses de Israel ya que plantea la creación de un Estado palestino con soberanía limitada, la anexión de parte de Cisjordania ocupada y una capital en una zona reducida y periférica de Jerusalén Este.
Por otro lado, la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos afirmó ayer que al menos 23 milicianos proiraníes y miembros de las tropas sirias habían muerto durante un ataque con misiles lanzado esta madrugada contra territorio sirio del que Damasco acusó a Israel. El observatorio dijo que la cifra de muertos se había elevado a 23, de los que "15 son milicianos leales a Irán, incluyendo 5 sirios y el resto de otras nacionalidades, entre ellos 3 iraníes".
