Bruselas - El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) falló ayer que Google, el principal motor de búsqueda en Internet, solo deberá aplicar el derecho al olvido en sus versiones europeas. Una sentencia clave en materia de privacidad, que sitúa a la UE a la vanguardia de este tipo de regulación pero que limita los derechos de los ciudadanos europeos a las fronteras del bloque La regulación del ámbito digital será uno de los temas centrales de debate en el nuevo ciclo político que se abre en Bruselas. Una legislación que llega con cuentagotas, pero que ha situado a la Unión Europea a la vanguardia de las normas de privacidad y protección de datos. Sin embargo, la última decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), aunque defiende los intereses de los ciudadanos del bloque comunitario, restringe sus derechos a las fronteras de la UE y deja un vacío regulatorio en el resto del mundo.

La decisión de la corte de Luxemburgo indica que la eliminación definitiva de datos, también conocida como derecho al olvido, es una obligación para Google, el motor de búsqueda más utilizado en el mundo. Sin embargo, las peticiones de este borrado llevadas a cabo por ciudadanos europeos solo se aplicarán a las versiones europeas del buscador norteamericano.

De esta manera, la empresa con sede en California, puede seguir almacenando enlaces de acceso a información personal en el resto de sus versiones. El único requisito es que se impida o dificulte a los internautas ubicados en la UE el poder acceder a estos enlaces. “Desde 2014, hemos trabajado duro para implementar el derecho al olvido en Europa, y alcanzar un equilibrio sensible entre el derecho de la gente a acceder a la información y su privacidad. Es bueno ver que el Tribunal coincide con nuestros argumentos”, señalaron fuentes de la compañía tras el resultado de la vista, según recoge la agencia Reuters. - Aquí Europa