Por primera vez en la historia, los líderes de la Unión Europea (UE) respaldaron anoche en una cumbre por videoconferencia la propuesta de la Comisión Europea (CE) de cerrar las fronteras exteriores comunitarias a ciudadanos de terceros países durante treinta días, salvo en algunas excepciones, para frenar la expansión del brote de coronavirus. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, anunció al término de la reunión que los jefes de Estado y de Gobierno comunitarios se mostraron a favor de la propuesta según la planteó la Comisión Europea y dijo que la próxima semana volverán a verse por videoconferencia para evaluar la crisis causada por el covid-19.

El objetivo del histórico cerrojazo es tanto contener la expansión del coronavirus como evitar la aparición de controles fronterizos dentro de la UE. Pero en ambos casos la medida parece llegar demasiado tarde para garantizar su efectividad.

Europa sigue como foco mundial de la pandemia de coronavirus, de la que se registran más de 26.000 casos en Italia, más de 11.000 en España, unos 6.600 en Francia y 6.000 en Alemania.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que Europa debe duplicar o triplicar el nivel de esfuerzo para contener el coronavirus, al tiempo que admitió el riesgo de ruptura en el aprovisionamiento de suministros médicos esenciales, en particular de antibióticos, tratamientos para la diabetes y la hipertensión, así como para la tuberculosis y el VIH.

Los líderes acordaron "reforzar las fronteras exteriores mediante una restricción temporal de los viajes no esenciales a la UE por un periodo de treinta días, según el enfoque propuesto por la CE", señaló Michel, quien dejó claro que "reafirmamos la necesidad de trabajar juntos y hacer todo lo necesario para afrontar la crisis y sus consecuencias".

De acuerdo a la propuesta de la CE, sí podrán entrar en territorio comunitario ciudadanos de la UE o residentes de larga duración que regresen a casa, así como miembros de su familia y del personal diplomático destinado en la Unión.

Michel explicó que, para limitar la expansión del virus, aprobaron las directrices propuestas por la Comisión sobre gestión de fronteras, que buscan garantizar el paso de medicinas, alimentos y bienes y que los ciudadanos europeos puedan viajar a sus países de origen. Dijo igualmente que "se encontrarán soluciones adecuadas para los trabajadores transfronterizos".

Apoyo unánime La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, explicó que la restricción temporal de la entrada a la UE tuvo un apoyo unánime y señaló que su aplicación corresponde ahora a los Estados miembros, "que dijeron que actuarán inmediatamente".

A fin de garantizar el suministro de equipos médicos, los líderes respaldaron la propuesta de la CE de que haya una decisión previa para exportar ese material y respaldaron el trabajo del Ejecutivo comunitario con la industria sobre licitaciones públicas y para comprar equipos de protección a través del marco de protección civil europeo.

En tercer lugar, para promover la investigación, Michel dijo que los líderes urgieron a compartir información para poder "desarrollar una vacuna que esté disponible para todos los que la necesiten". "Invitamos a los Estados miembros a apoyar a las empresas europeas en ese sentido", agregó.