El padre del sencillo y mudo topo Krtek

Bilbao. El dibujante checo Zdenek Miler, creador del popular topo Krtek, dibujo animado creado hace casi medio siglo que hizo reír a varias generaciones de niños en su país y que traspasó fronteras, falleció el pasado 30 de noviembre a los 90 años de edad, tras una larga enfermedad, en una residencia de ancianos en las afueras de Praga, informó su nieta Karolina Milerova.

Nacido el 21 de febrero de 1921 en la ciudad de Kladno, Miler estudió en la Academia de Artes, Arquitectura y Diseño en Praga. Después de la Segunda Guerra Mundial, trabajó en las primeras películas de Jiri Trnka, gurú de los animadores checos. Fue mientras trabajaba en los Estudios Barrandov en 1954 que fue asignado a hacer lo que se llamó How the Mole Got His Trousers.

Las películas de Miler atraían al público en más de ochenta países, incluyendo China, India y Japón. Aunque Miler, diseñador, guionista y director, creó muchos dibujos durante su larga vida, fue el de Krtek el que más fama le dio. Pequeño, negro, sencillo y mudo, el topo Krtek protagonizó más de 50 películas. También se han vendido más de cinco millones de ejemplares de libros de Krtek, traducidos a veinte idiomas, así como juguetes, mochilas, puzzles y fundas de almohada

haciendo pantalones Miler literalmente tropezó con su personaje central. En 1954, cuando lo que era Checoslovaquia estaba bajo control de los comunistas, estaba trabajando en un estudio de cine cuando los jefes del partido encargaron una historieta para enseñar a los niños cómo se hacen los pantalones. El concepto era aburrido y Miler no quería imitar los dibujos de Disney. Paseando en el bosque una noche, tropezó con la madriguera de un topo y pensó que era una buena idea.

En la película de trece minutos, Krtek hace un par de monos de lino con la ayuda de una rana, que lo pone a remojo, arañas que hacen el hilo, hormigas que tejen la tela y un cangrejo que corta el tejido.

A partir de ahí, Krtek, un topo de nariz respingona y grandes ojos, ha deleitado a los amantes de las historietas de todo el mundo durante más de cincuenta años. Pero Krtek nunca sedujo a Estados Unidos, lo que atribulaba al crítico de cine Michael Medved, que trató durante años de fomentar una cultura de la historieta en su país. "Siempre he considerado que Miler es quizás el más grande creador de dibujos animados vivo de este país", dijo Medved al New York Times en 2004.

El dibujante siempre declaró su amor por su criatura. "Nos queremos mucho. El mundo no nos gustaría en absoluto si no nos tuviéramos el uno al otro", decía.

Además de su nieta, a Miler le sobreviven su esposa, Emilie; y dos hijas: Katerina y Barbora.