Bilbao. El domador y empresario Ángel Cristo falleció en la madrugada de ayer de un paro cardiaco en el Hospital Universitario de Alcorcón a los 66 años de edad. Cristo fue un eterno protagonista de la prensa rosa a partir de su matrimonio con la actriz Bárbara Rey. Ambos se separaron posteriormente de mutuo acuerdo, pero protagonizaron multitud de incidentes de los que dieron buena cuenta los denominados periodista del corazón.

Ángel Cristo nació en Huelva el 17 de octubre de 1944. Hijo de Margarita Dordid, contorsionista cuyo nombre artístico era la pequeña Carolina, y del trapecista griego Christophol Papadopulos, vivió desde que nació bajo la carpa del pequeño circo propiedad de su familia, en cuyos espectáculos participó en todo tipo de variedades, aunque siempre sintió predilección por las fieras.

A los 17 años, el domador que trabajaba con ellos tuvo que ausentarse urgentemente y le pidió reemplazarle. Sin avisar a su padre realizó el ensayo del número con los leones, pero finalmente no pudo actuar en el espectáculo debido a que un vendaval se llevó la carpa del circo. Tras este intento fallido, debutó como domador en 1966, el mismo día de su cumpleaños. Cuatro años después se convirtió en empresario al adquirir un pequeño circo que con el tiempo se transformó en el Circo Ruso, con más de 300 personas trabajando bajo su dirección.

MUCHOS ACCIDENTES Cristo sufrió numerosos accidentes de trabajo a lo largo de su carrera, algunos de ellos de gravedad, pero siempre salió adelante pese a las secuelas que le dejaron, sin embargo, el 29 de julio de 1990 se marca en el calendario como la fecha clave, en la que su declive comenzó realmente: ese día sufrió en Lérida uno de los percances más graves de su carrera profesional. Tres leones y un tigre se abalanzaron sobre él y le produjeron heridas en el cuello, tronco y extremidades, así como fractura de seis costillas. Estos mismos animales le atacaron de nuevo unos meses después y, una vez más, tuvo que pasar por el quirófano.

El domador, que había entrado en crisis profesional a partir de ese año, fue objeto de denuncias en 1991 y 1994. La primera vez por supuesto maltrato a sus animales y la segunda, a raíz de la utilización de un bebé y dos niños en un número con elefantes. Por esta última, el domador fue condenado al pago de una multa de dos millones de pesetas.

El 20 de mayo de 1995 ingresó de urgencia en el hospital gaditano de Puerto Real por ingestión de una importante cantidad de barbitúricos. El domador pasaba en ese momento por un mal momento económico y sentimental, después de romper con su socia y trapecista, Angélica.

Su situación económica se agravó en 1998 con el embargo de su circo y, especialmente, en octubre de 2000, cuando la Comunidad de Madrid le impuso una multa de más de 2.000 euros por infracción de la Ley de Protección de Animales. Para pedir tanto la devolución de su circo como de sus fieras, en junio de 2001 realizó una huelga de hambre de seis días en Madrid.

Por su manifiesta depresión, en marzo de 2003 ingresó en la comunidad terapéutica Peniel, en Córdoba, para someterse a un tratamiento de rehabilitación. Dado de alta, en septiembre de 2004 entró de extrema gravedad en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Parc Taulí de Sabadell (Barcelona) tras ser intervenido de urgencia de una perforación duodenal severa.

A lo larga de su carrera ha recibido numerosos reconocimientos. Entre todos, destaca la Medalla de Oro que le concedió el Festival Internacional del Circo en 1982.

Boda con Bárbara Rey Pese a su condición de artista circense (era el José Tomás de los circos), su fama comenzó a extenderse realmente cuando contrajo matrimonio con Bárbara Rey, en 1980. Con ella estuvo ocho años. Sin duda fue una relación pasional: a los dos meses de conocerse anunciaban su boda, que se celebró, por cierto, en una carpa de circo en Valencia. Ella comunicó que dejaba su prometedora carrera para "dedicarse a su marido", según comunicó. La pareja tuvo dos hijos y se separaron ocho años después de casarse. Desde su separación (que por cierto fue muy comentada, pues dicen que pagaron cinco millones de pesetas a Bárbara Rey por la exclusiva), ambos protagonizaron varios incidentes en público de los que se hicieron eco los medios de comunicación. Tuvieron dos hijos, Ángel (1981) y Sofía (1983).

Rota su relación con la actriz, el domador mantuvo diversas relaciones; entre ellas, con la bilbaina Berta Cilleruelo (1990) y la trapecista checa Angélica (desde 1992 a mediados de esa década).