Síguenos en redes sociales:

Ángeles custodios

Lagun, la empresa pionera en acompañamiento nocturno a mujeres, traspasa las fronteras del País Vasco

Ángeles custodios

FUNDADA en 2012, Lagun es la primera empresa en poner en marcha un proyecto de acompañamiento nocturno a mujeres durante las fiestas en ciudades y pueblos. Se estrenó el pasado año en Euskadi durante las fiestas patronales deEl Carmen en Santur-tzi, nueve días en los que la entidad vasca prestó asistencia a cerca de 400 mujeres, la mayoría menores de edad, con el fin de prevenir posibles agresiones sexuales en el regreso a sus casas. “Lo ideal sería que no tuvieran que existir iniciativas de estas características porque las agresiones hubieran desaparecido, pero desgraciadamente no es así y podemos ser útiles a muchas jóvenes; numerosas familias se ponen en contacto con nosotros para que acompañemos a sus hijas tras un evento festivo”, explica José Manuel López de la Manzanara, responsables de la organización vasca.

Lagun ofrece una gran variedad de servicios para eventos y espectáculos, que van desde controles de acceso, prevención y evacuación hasta control de masas o vigilancia de seguridad en colaboración con empresas de este ramo. Los integrantes de la empresa vasca no son vigilantes de seguridad ni van armados, ni llevan defensas. “Ellos y ellas son auxiliares de prevención y cuentan con una amplia experiencia en las actuaciones citadas”, recalca el responsable de Lagun, satisfecho porque sus servicios están traspasando las fronteras de Euskadi; en concreto, el Ayuntamiento de Jerez al conocer el proyecto del consistorio santurtziarra lo puso en marcha en su popular feria.

Durante Aste Nagusia de Bilbao, trabajadores de Lagun, enfundados en una camiseta morada donde se leía No es No/Ez beti da ez, recorrieron las zonas de conciertos de los recintos festivos dejándose ver “para que si alguna joven se encontrara en una situación comprometida supiera que podía acudir a ellos”, reconoce.

Una característica que distingue a los profesionales de Lagun es que no llevan uniforme, aunque sí una acreditación, sellada por el consistorio de turno, donde se especifica que se trata de un acompañante autorizado. Van vestidos como cualquier otra persona de las fiestas de la calle. “La finalidad es que no sean catalogados como escoltas, que no lo son, sino como acompañantes; podrían ser perfectamente sus hermanos, amigos, etc. Se trata de que no sean reconocibles como tales”, apunta el responsable de Lagun.

La empresa se ubica en la capital vizcaina, aunque ante la demanda ha inaugurado recientemente una delegación en Cádiz. “La experiencia de la Feria de Jerez fue excelente; mujeres de todas las edades recurrieron a nosotros, a diferencia de Santurtzi donde acompañamos sobre todo a menores de edad”, de las que no se separaban hasta que las dejaban en el portal y sus aitas daban el ok.

En Santurtzi, el primer municipio vasco que contrató el servicio, se buscaba que no se enturbiara la imagen de la ciudad como fue con la imagen de La Manada en los Sanfermines. Conscientes también de que no es la solución contra los comportamientos y las agresiones sexistas; el proyecto de la localidad vizcaina, que también tiene sus detractores, supuso un respiro de tranquilidad para muchas adolescentes que “iban acompañadas, pero no señaladas como si llevaran escoltas. Muchas familias nos dieron las gracias por nuestro trabajo, porque sabían que sus hijas no sufrirían ningún tipo de acoso y si lo padecían tendrían a su lado a alguien que les ayudaría. Fue una experiencia que nos gustaría trasladar a otros municipios”, apostilla.