El chico más en forma de España... ¡es vasco!
Este mes se van a cansar de ver su cara y sus músculos en los kioskos y sí, antes de que se lo pregunten, es sobrino de Iñaki
DONOSTIARRA, 1,74 centímetros de altura, músculos de acero y una forma física a prueba de cualquier comparación. A sus 28 años recién cumplidos, Alexander Anasagasti pesa 77 kilos de pura fibra y está en la cumbre del crossfit, el método de entrenamiento de moda y un deporte que proporciona resistencia, fuerza física, flexibilidad, potencia y equilibrio a partes iguales. Él es el rey en el que ya denominan el deporte definitivo porque Alex Anasagasti es el mejor atleta de crossfit del Estado por segundo año consecutivo al ser ganador de esta disciplina en 2018 y 2019. Estos títulos, su porte y su personalidad arrolladora le han aupado a la portada de la revista Men’s Health de noviembre.
El atleta, en Mallorca estos días de forma accidental -“cuando termine el Open me vuelvo a Donosti”-, compagina sus entrenamientos con su trabajo en CrossFit Zurriola, Urquijo y Gorbeia, y ostenta el título del hombre más en forma de España. “Ese es el título que tengo y hasta que se acabe este Open no me lo quita nadie”, declara. Inmerso de lleno en las pruebas, Anasagasti, explica su funcionamiento. “Para ser campeón nacional hay que ganar el Open que es un proceso clasificatorio que dura cinco semanas. Cada semana sacan una prueba de crossfit y cada semana tendrás una puntuación. Cuantos menos puntos obtengas a lo largo de las semanas, mejor atleta eres y más en forma dicen que estás”, aclara, despejando dudas. “Es como una especie de fitness que se evalúa a lo largo de cinco semanas en distintas pruebas. Y cuanto más compensado seas y más en forma estés, mejor se te darán los ejercicios”, afirma el deportista que ha quedado primero de España en los dos últimos WODs, Workout of the Day (Entrenamiento del día).
Curiosamente este vasco con torso de lujo y cuerpo de infarto -y que no tiene reparos en confirmar que es sobrino de Iñaki Anasagasti “¿por qué si nos llevamos fenomenal?”-, tiene un alias, Mr. Weak (Mister Débil). “Me lo puse cuando acababa de empezar. Estaba en EE.UU. y los atletas allí levantaban mucho más peso que yo. Hoy en día sigo teniendo esa faceta como deportista porque, por regla general, mis contrincantes son más fuertes, mientras que yo me caracterizo por la capacidad de trabajo y por otras habilidades”, afirma divertido. De hecho, confiesa que todo lo que sea colgarse de las barras se le da bien y todo lo que sea levantarlas es su punto más flojo porque los ejercicios de fuerza son su talón de Aquiles. “Yo puedo levantar 200 kilos del suelo. Para una personal normal es muchísimo pero para nosotros no”, revela.
Antes de descubrir el crossfit, el atleta vasco había competido durante 8 años en kick-boxing y boxeo. No en vano empezó con el deporte con solo 15 años. “Pero creo que ya ha encontrado mi sitio porque es el deporte en el que más tiempo he durado a este nivel. Yo creo que me quedo con este entrenamiento. Estoy muy contento, siempre está cambiando, siempre está mejorando y continuamente puedes aprender cosas nuevas”, declara.
Pero Anasagasti no es solo un animal de gimnasio. “Se dice que entrenamos mucho pero eso depende de cada persona. Es verdad que pasamos mucho tiempo en el gimnasio pero no solo estamos haciendo ejercicios de alta intensidad, también calentamos, hacemos estiramientos o perfeccionamos la técnica. Yo diría que hago dos sesiones al día entre hora y media o dos horas cada sesión”, asegura.
Estos días convive, sin embargo, con la sombra de arrojar la toalla. “Tengo una lesión en la cadera y quizá en cualquier momento deba dejar el Open porque el cuerpo me dice basta. Hasta ahora he podido hacer los ejercicios sin dolor pero en cualquier momento igual el cuerpo se queja. Yo seguiré haciendo lo que pueda hasta que tenga que parar porque mi salud corra peligro”. “He cometido el error de haber empezado el Open estando lesionado, pero ya que veo que voy bien ¿qué mejor qué intentarlo y seguir dando la talla?”, indica este atleta con el esfuerzo como leitmotiv.