EN mis muchísimos viajes de autobús me he dedicado a escribir crónicas de conciertos, entradas a mi blog My Martian World (mi mundo marciano) y he elaborado playlist, listas de discos favoritos”. Porque si de algo sabe Katrin Olmedo Basterretxea es de música. Y de esta vocación hace su vida. Por eso, aunque su actividad laboral iba por otros derroteros, ahora organiza conciertos, colabora en diferentes medios musicales y también es DJ. Además escribe un blog diferente: “Lo llamo mi mundo marciano porque me sentía como una marciana hablando de unos artistas que nadie conocía”. Esta joven de Laukiz cruzaba la península en clave de sol. “En los viajes daba las primeras pinceladas de las crónicas para luego perfeccionarlas en casa”. Porque a pesar de que ha estado mucho tiempo viviendo en Madrid, “venía a Bilbao cada dos por tres porque no hay nada como esto”.

Esta promotora musical independiente, Kobmusic, ha hecho sus primeros pinitos organizando tres conciertos, y tiene in mente otros tres. Ahora está como loca con su último descubrimiento, “el australiano Donny Benét, un artista que he traído de Sidney con música muy ochentera, estilo italodisco. La verdad es que ha triunfado, su directo ha chiflado y el telonero era un chico de Bilbao afincado en Madrid que se llama Pablo Ríos”, describe.

Agrega que “este mundo era mi sueño y cuando dejé mi trabajo, me contactaron”. Y es que aunque ella pensaba que su blog no lo leía más que su familia y amigos, resulta que un día le pidieron desde la web Entradas Agotadas colaboraciones para hacer playlist de canciones. “Porque yo en mi sección Vuelo a Marte las hacía. Selecciones especiales y temáticas del concepto tiempo, de música de origen asiático o de Nueva Zelanda. Parecen extravagancias pero todo tenía un orden y nada era casual”, explica convencida. Luego le ofrecieron empezar a pinchar como DJ, y muchas sesiones las volvió a preparar, cómo no, también en el autobús. De hecho, de escuchar tanta música ha adquirido un sexto sentido para saber qué es bueno. “He descubierto a muchos grupazos, y muchos temas que luego han sido elegidos como bandas sonoras de las campañas de El Corte Inglés o de anuncios de televisión”, asegura.

Pese a que lo que Katrin ha estudiado es Derecho, entiende la música como una forma de expresión maravillosa. Totalmente autodidacta, “en mi casa siempre se ha escuchado mucha música”, y ya desde pequeña hacía selecciones y grababa cintas. “De ahí me viene la afición”. Además se curtió escuchando muchas y buenas canciones en un trabajo poco creativo. “Había mucho ruido en la oficina y para aislarme me ponía los cascos”, se excusa.

Sin embargo, Katrin no solo ha hecho kilómetros en bus. “También he metido horas en BlaBlaCar en una época en que hubo huelga”. Así conoció a dos almas gemelas con las que, de nuevo, ha disfrutado compartiendo horas de música y conducción.