Un alto porcentaje de las mujeres obesas tienen grandes dificultades para quedarse embarazadas; y si esto sucede, la tendencia natural de su organismo es a producir un aborto espontáneo (inclusive con fecundación in vitro), debido a la alta posibilidad de que se produzcan malformaciones graves en la formación del tubo neural durante el período fetal.

Igualmente si el embarazo continúa adelante, van a tener serios problemas de salud que también pueden afectar al futuro bebé y a la madre, como la hipertensión o la diabetes gestacional.

En casos más severos, la hipertensión puede provocar un cuadro de eclamsia gravídica, poniendo en peligro la vida de la gestante.

En nuestro Centro de Excelencia, siempre aconsejamos a las mujeres con obesidad grave (IMC> 35) que deseen tener un bebé, que resuelvan en primer lugar su obesidad de forma segura y eficaz con nuestro modelo de Bypass miniinvasivo robótico de una anastomosis (BAGUA), y cuando se queden en su peso normal, pueden quedarse embarazadas cuantas veces quieran.

Así tenemos pacientes hasta con tres y cuatro hijos después de la cirugía.

El otro grave problema de las mujeres obesas, es su alto riesgo de padecer determinados tipos de cáncer, sobre todo los de tipo ginecológico sin excepción, pero con más frecuencia y agresividad el de mama.

Las posibilidades de fallecimiento por cáncer de mama en mujeres obesas se incrementan en un 75% más que en las mujeres sin obesidad.

Otros tipos de tumores ‘diana’ serían el renal y el colo-rectal.

El Dr. Miguel Ángel Carbajo, experto en el estudio y tratamiento de la obesidad, recomienda que “todas aquellas mujeres con índices de masa corporal (IMC) igual o superior a 35, se pongan en contacto con un Centro de Excelencia acreditado y poder guiar todo el proceso de control y normalización del sobrepeso, y con más razón si quieren ser madres”.

¿Qué puede ocurrir si soy obesa y me quedo embarazada? Como hemos comentado, lo más probable es que el embarazo no llegue a término. En el caso de persistir, hay que considerar que cualquier embarazo en una mujer con obesidad es un embarazo de riesgo, por tanto debe estar monitorizado constantemente or el riesgo de diabetes e hipertensión gravídica y sus severas consecuencias para el bebé y la madre. En estos casos la cesárea es casi obligada, así como los partos prematuros.

Gracias al trabajo y la trayectoria de profesionales que estudian y analizan con dedicación cada uno de los casos de obesidad que cruza las puertas de nuestro Centro de Excelencia, hoy en día podemos afirmar con rotundidad, que la mayoría de las mujeres portadoras de obesidad y que se encuentran en su edad fértil, pueden quedarse embarazadas sin ningún problema después de someterse a cirugía de la obesidad mediante la técnica BAGUA, al igual que el riesgo de padecer cáncer ginecológico se minimiza de manera extraordinaria o desaparece cuando se alcanza un peso normal y éste se mantiene a lo largo de la vida, algo importante de recalcar, ya que no todas las técnicas que hoy se pueden aplicar consiguen resultados a largo plazo satisfactorios, seguros y eficaces.