Bilbao. Este periodista madrileño insiste en que "la transformación digital es inevitable, la forma de consumir, sea papel o sea televisión, está cambiando y tenemos que adaptarnos".
¿Las televisiones han remoloneado para engancharse a internet?
Han sido las últimas en el proceso de entrada de las empresas tradicionales de comunicación en internet, pero ha sido por una cuestión puramente tecnológica. Hasta que no ha habido un desarrollo del ancho de banda que ha permitido que los vídeos se vieran con calidad y con rapidez y que la imagen y el audio tuvieran una calidad suficiente, no ha habido un desarrollo potente, pero no ha sido solo aquí.
En España, Antena 3 fue pionera...
Así es, en 2001 fuimos la primera web que empezó a emitir en streaming, no hacía falta descargar los vídeos y los veías según los recibías. Hace seis años ya empezamos a apostar por la emisión de contenidos que fueran más allá de lo que trascendía en televisión y en 2007 fuimos los primeros en crear un canal en YouTube porque consideramos que es una herramienta que nos sirve para estar en contacto con nuestros fans. Aquel año también fuimos la primera televisión que apostó por emitir capítulos completos, íntegros y abiertos, con una temporada de El Internado.
¿No temieron perder en la televisión lo que ganaran en internet?
Sí existía el miedo de que internet pudiera canibalizar audiencias, de que si la gente lo veía en internet no lo iba a ver en televisión... pero la verdad es que fue un éxito de público y de publicidad y, sobre todo, de lo que más interesaba: fue un éxito de convergencia y de complementariedad. No era un contenido alternativo sino complementario y permitía incluso fidelizar a muchos espectadores en series y programas.
¿Ha ayudado la apuesta de la cadena por las series de ficción propia, especialmente de corte juvenil?
Tenemos la suerte de que esta casa siempre se ha distinguido por su apuesta por la ficción nacional, por las series, y muchas de ellas tienen un importante público juvenil, que es el que más coincide con el consumo de internet. Series como El Internado, Física o Química y Los Protegidos han tenido siempre un éxito arrollador en la Red. Es verdad también que, según vamos avanzando en el tiempo, ese consumo diferido se amplía a toda la población y ya no son solo los chavales los que ven contenidos en internet. El consumo está creciendo en todas las edades y en todos los tipos de formatos.
¿Es la sinergia perfecta? ¿No hay ningún problema?
La ventaja de tener una televisión es que te da una audiencia y una comunicación masiva y la desventaja es que cuando un producto no funciona en televisión muchas veces es inmediato el fracaso también en la Red. Son contenidos que van muy ligados en los dos soportes. Es verdad, sin embargo, que hay algunos casos distintos. Un concurso en televisión puede tener una audiencia millonaria, pero si no tienes algo que lo haga distinto en la Red no te aporta nada. Voy a poner dos ejemplos nuestros: de Ahora caigo solo damos la ficha, pero en Atrapa un millón hemos generado una aplicación que permite a los usuarios on line jugar en tiempo real con las mismas preguntas y los mismos tiempos sincronizados que la emisión en directo y eso aporta muchos espectadores, decenas de miles.
¿Qué hacen en la web cuando termina la temporada de una serie?
Cuando una serie está en emisión sus consumos son altísimos, y no solo el contenido que se ve en televisión sino todo lo que genera alrededor, pero cuando dejaba de emitirse desaparecía por completo. Por eso hemos inventado contenidos para mantener vivas esas series y que entre temporada y temporada haya algo para estos fans que alimente esa demanda. En algunos casos como Hispania es un videojuego, donde tenemos casi 300.000 jugadores; y en otros casos son twittersodios o blogs como en El barco, donde incluso Twitter a nivel mundial nos ha felicitado porque era la primera vez que doce personajes de una serie tenían su Twitter propio como si fueran reales y contestaban a los tuiteros. Esto en el mundo de los fans y de los más jóvenes funciona muy bien.
En 2008 dieron otro paso importante, el proyecto 3.0.
Fue una apuesta por los tres canales que teníamos entonces y en tres pantallas: televisión, PC y móvil. Aquello, que sonó mucho a efecto de marketing -era lanzar el mensaje de "como quieras, cuando quieras y donde quieras"-, fue muy importante internamente porque a partir de entonces todos los programas tenían un planteamiento multimedia. Desde el primer momento se pensaba en qué tipo de contenidos se iban a generar en torno a cada espacio: videojuegos, aplicaciones, tomas falsas, making off... En mayo de 2010 lanzamos el nuevo portal en el que ha habido una apuesta muy clara por los contenidos completos. Cada programa, cada serie, tiene su site donde se está generando contenido que no se ve en televisión. Ahora mismo, quienes entran en antena3.com se encuentran con que el 50% de lo que hay allí no se ha emitido, se ha hecho ad hoc solo para internet.
¿Cuáles han sido los factores fundamentales para llegar a la situación actual?
Uno es el desarrollo del vídeo, el vídeo como formato entra y arrasa en la Red; y otro es el de red social, que es el de la interactividad y el que nos permite comprender que hay mucha gente que ya no se conforma con ver la televisión. Si entras en Twitter una noche normal, ves que muchos de los trending topic son contenidos televisivos de cualquier cadena. Las redes sociales están influyendo muchísimo en la nueva forma de ver la televisión.
¿Cómo repercute todo esto en la publicidad?
Nuestro contenido principal sigue siendo la televisión. Obviamente, las audiencias y sobre todo el mundo comercial en cuanto a ingresos es asimétrico: todavía la televisión es muchísimo más potente que internet, pero es verdad que internet está creciendo y que nos permite jugar con públicos y cruzarlos de un sitio a otro. Cuando hay un lanzamiento de una serie nueva podemos utilizar a los casi cinco millones de personas que tenemos en redes sociales y lanzarles contenidos exclusivos que fomentan que esta nueva forma de ver la televisión trascienda del público joven y se vaya extendiendo.
¿Cómo será en el futuro la relación entre televisión e internet?
La convergencia de internet y televisión es total y va a serlo más en los próximos años. Hasta ahora estábamos hablando del mundo del PC. Ya estamos viendo el consumo de los productos que estamos lanzando para tabletas y es espectacular porque es un formato muy cómodo de ver y de gestionar, para verlo en el sofá o en la cama. La visión de capítulos está creciendo de manera exponencial semana tras semana. O también productos como las propias televisiones que venden todos los fabricantes, aparatos híbridos que ya llevan conexión a internet. No solo permiten navegar, sino que tenemos portales nuestros que ya están integrados para poder ver capítulos que te has perdido o no quieres ver en directo. Son experiencias todavía muy iniciales, algunas incluso piloto, pero que yo creo que son inevitables y que tenemos que desarrollar rápido. Esto avanza a pasos agigantados.