Douglas, en el peor papel de su vida
El actor estadounidense se confiesa en televisión y revela detalles del cáncer de garganta que padece
bilbao
Michael Douglas lucha a brazo partido contra el tumor de garganta que le diagnosticaron a mediados de agosto y está dispuesto a librar una batalla sin cuartel. "El cáncer se encuentra en una etapa 4 pero afortunadamente no ha hecho metástasis", acaba de admitir. El actor acudió el martes al show televisivo de David Letterman para explicar públicamente en qué punto se encuentra su enfermedad y para reconocer que la quimioterapia "te noquea muy duro". El actor, de 65 años, reveló en una entrevista en CBS nuevos detalles sobre el tumor. "Es un cáncer de nivel 4, lo cual significa que es grave", confesó Douglas en el Late Show de Letterman. El actor, que se encuentra promocionando su nueva película Wall Street: el dinero nunca duerme, también dirigida por Oliver Stone, se sinceró y aseguró que el alcohol y el tabaco han podido ser la causa de su dolencia.
El pilar de Hollywood -como un día lo fuera su padre Kirk Douglas, ahora con 93 años- y protagonista de cuarenta películas, había anunciado en agosto su enfermedad en una entrevista con el semanario People, pero no había revelado la magnitud del mal. A pesar de la gravedad del diagnóstico, Douglas se mostró de buen talante ante las cámaras. "A uno le gustaría que fuese de nivel 1, pero lo más importante de todo es que no se extienda. Yo lo tengo en la cabeza y del cuello para arriba. No ha bajado", afirmó.
Vestido con un traje blanco y con algún kilo menos, el actor volvió a hacer alarde del valor y el coraje que siempre le han caracterizado fuera y dentro de la gran pantalla. Según Douglas, el diagnóstico le fue realizado hace sólo tres semanas, a pesar de que hace varios meses que sentía molestias persistentes en la garganta. "Tenía la voz ronca y molestias al tragar. Consulté a una serie de médicos y no me encontraron nada". Con esa tranquilidad inicial, se fue de vacaciones. "Pasé un magnífico verano con Catherine (Zeta-Jones) y los chicos en Mallorca, y fuimos a Rusia, a San Petersburgo, fue fantástico". Sin embargo, al regresar a EE.UU., la cruda realidad le asaltó de golpe y los médicos descubrieron la verdadera naturaleza del mal.
Douglas ya ha completado una de las ocho semanas de tratamiento combinado de radioterapia y quimioterapia que los médicos le están administrando. "Los porcentajes son muy buenos. No me gustaría decirlo, pero en este momento, creo que las posibilidades que tengo de sobrevivir deben ser del 80%". El tratamiento, no obstante, ha sido "intenso" y la quimioterapia "te noquea muy duro". Letterman le preguntó directamente si había sido fumador y Douglas le respondió tajante: "Este tipo de cáncer es causado por la bebida y los cigarrillos". En caso de que el tratamiento no resultara eficaz, habría que intervenir quirúrgicamente corriendo el riesgo de que el actor no pueda volver a hablar. El showman de la CBS, conocido por su mordaz sentido del humor, le dio un abrazo al concluir la entrevista grabada el martes en Nueva York.
La estrella ha preferido hacer pública su enfermedad debido a que dentro de unos meses sería evidente e iba a ser inevitable cancelar algunos de los compromisos previstos con motivo de la promoción de la última entrega de Wall Street, por la que ganó un Oscar al mejor actor.
Definitivamente, 2010 está resultando una pesadilla para el protagonista de Atracción Fatal,Instinto Básico o Traffic. El primogénito del actor, Cameron Douglas, fue sentenciado el pasado abril a cinco años de prisión al ser hallado culpable de traficar drogas. La justicia condenó a Cameron, de 31 años de edad, por ser intermediario de una red de narcotraficantes de metanfetaminas entre California y Nueva York y por posesión de heroína.
Pero Michael es un hombre optimista y "muy valiente", calificativo que usó Letterman para describir al actor durante su intervención televisiva, y ni por un momento le ha pasado por la cabeza tirar la toalla. Arropado por su esposa, la también actriz Catherine Zeta-Jones y por los dos hijos que tienen con ella, Dylan, de 10 años, y Carys, de 7, Michael regresará dentro de unos meses a la a la escena pública para contar que, seguramente, ha superado "la gran batalla de su vida".